Desde una escapada por la sierra de Aracena y Picos de Aroche en Huelva hasta una ruta por la Alpujarra granadina, entre otros destinos, Andalucía ofrece numerosas posibilidades a los aficionados del mototurismo en verano. Una época en la que conviene prestar especial atención a la puesta a punto del vehículo y
elegir seguros de moto con las coberturas apropiadas.
¿Qué revisar en la puesta a punto de la moto en verano?
En lo referente al mantenimiento, es aconsejable acudir a un servicio oficial posventa o un taller de confianza para que sus profesionales lleven a cabo una revisión integral. Comenzando por el
líquido refrigerante, cuya función es proteger la mecánica de la moto en situaciones de temperaturas extremas, y el
lubricante, que también contribuye a descargar el calor que producen tanto el motor como el embrague.
De igual manera, en la puesta a punto se ha de comprobar el estado del denominado
triángulo de la seguridad –conformado por neumáticos, frenos y suspensiones–, los
filtros, la
cadena de la transmisión secundaria y la
batería. Asimismo, se recomienda verificar el funcionamiento de los
grupos ópticos, pues son los encargados de brindar un óptimo campo de visión e incrementar la visibilidad de los motoristas ante el resto de usuarios de la vía.
Además, los expertos en seguridad vial advierten que es fundamental utilizar una
indumentaria homologada, cargar el equipaje correctamente, planificar los desplazamientos con tiempo suficiente y evitar conducir en las horas centrales del día. Y no menos relevante:
hidratarse con agua y no ingerir comidas copiosas ni alcohol.
¿Por qué es importante elegir un buen seguro de moto?
Pero incluso con una buena puesta a punto y extremando las precauciones, los recorridos sobre dos ruedas pueden verse afectados por un imprevisto. Por ello, de cara a estar lo más protegidos posible en verano, los profesionales del sector asegurador sugieren incluir las siguientes
coberturas en los seguros de moto:
- Asistencia en carretera. Se trata de una garantía esencial. Gracias a ella, una entidad aseguradora intentará solventar una avería in situ. Y de no ser posible, se encargará de trasladar el vehículo a un taller y transportar al motorista y su acompañante al destino indicado.
- Accidentes del conductor. Esta cobertura se ocupa de cubrir la asistencia médico-farmacéutica cuando un motorista sufre daños personales en un accidente, con o sin contrario, ocasionado por el propio asegurado. Igualmente, contempla indemnizaciones por invalidez permanente y fallecimiento.
- Equipamiento. Y a través de esta garantía, que se suele contratar junto a las modalidades de Robo e Incendio o Todo Riesgo, una compañía cubre tanto la indumentaria personal como los accesorios instalados en la moto y declarados en la póliza.
Por lo que respecta a la cobertura de
Responsabilidad Civil, obligatoria en todos los seguros, indemniza por los daños personales o materiales que puedan causarse a terceros –incluyendo en esta última condición al pasajero de la moto asegurada–.
En definitiva, elegir un
buen seguro de moto es primordial para estar bien cubiertos en verano. En este sentido, conviene decantarse por una entidad especializada que facilite contratarlo de manera rápida y sencilla por Internet. Y que posibilite personalizar la póliza en función de las necesidades del cliente.
