Todo ello para demostrar, una vez más, que el panorama que se presenta en los autobuses urbanos en el término municipal de Jerez es de color muy oscuro, difícil y complicado. De un lado la lastrosa trayectoria de Cojetusa que, presumiblemente, se encuentra dando sus últimos coletazos en la ciudad a la espera de que hoy mismo abone, tal y como prometió el lunes en el Sercla, la paga extraordinaria del mes de mayo a sus empleados. De otro, el lamentable estado que presenta la flota, tanto en el casco urbano como en el Jerez Rural.
Así pues, ambos servicios se encuentran a la espera del relevo: en las pedanías, según avanzó María del Carmen Martínez, “el cambio se producirá hacia el mes de septiembre, después de dar un ultimátum a Linesur para la sustitución por autobuses nuevos”.
Y es que esta delegada mantuvo el pasado miércoles un encuentro en Estella, justo después de que los vecinos de esta pedanía realizasen una manifestación por el mal estado de los vehículos, con varios alcaldes y delegados de la zona rural, encuentro en el que se comprometió a dar un buen tirón de orejas a Linesur para la renovación de la flota. Una empresa, Linesur, que finalmente no comprará Cojetusa por no haber encontrado financiación y cuyos empleados iniciarán este lunes, 14 de junio, una huelga indefinida después de que no se les han abonado las nóminas de abril y mayo. Y eso que un principio iba a desembolsar una millonada de euros por Cojetusa.
Peor se presenta el horizonte para el transporte urbano en la ciudad. A pesar de que, según apuntó Martínez, “hay cuatro empresas interesadas en hacerse con la concesión municipal, el relevo se puede dilatar hasta en ocho meses”, con la consiguiente agonía mensual en los pagos al personal de Cojetusa. Eso sí, estas cuatro empresas interesadas ofrecerían el servicio a coste cero.
Y es que una vez que se ha hecho oficial que esta empresa ha presentado al Ayuntamiento su deseo de rescisión de contrato, ahora se abre un plazo para que un juez decida la cantidad que las arcas locales tendrán que sufragar para rescatar la concesión y poder sacarla de nuevo a subasta.
Mientras tanto será el propio Consistorio quien pueda gestionar los autobuses o bien ceder el servicio temporalmente sin coste alguno de compra a una empresa, y es ahí donde las cuatro supuestas compañías interesas de las que ayer habló Martínez entrarían en escena.
Envía tu noticia a: participa@andaluciainformacion.es
