Les golpearon e inmovilizaron hasta que llegó la Policía alertada por las cámaras de seguridad
La Audiencia de Sevilla ha condenado a seis meses de cárcel a dos hombres y sus hijos por retener durante quince minutos a dos nigerianos que acababan de estafarles 86.100 euros con el timo de los billetes teñidos, a los que además deberán indemnizar en dos mil euros.
La sentencia de la Audiencia, a la que ha tenido acceso Efe, condena a seis meses de cárcel cada uno a los nigerianos M. G. y M. C. por un delito de estafa en grado de tentativa dirigida contra dos empresarios del sector químico de Sevilla.
Los africanos, según la sentencia, convencieron a sus interlocutores de que poseían un sistema para duplicar billetes de curso legal, utilizando diversos procedimientos químicos, y les hicieron varias "demostraciones" con las que se ganaron su confianza.
El 26 de diciembre de 2007, quedaron en que los empresarios les entregarían una importante cantidad de dinero y se citaron con ellos en una nave del parque industrial San Jerónimo de Sevilla para practicar el proceso químico ficticio y pactado.
Sobre las 22.40 horas, afirma la sentencia, los empresarios se dieron cuenta del timo y exigieron a los guineanos el dinero que habían entregado, momento en el que se inició una discusión y un intento de los timadores por salir de la nave.
En ese momento, los empresarios J. Z. N. y R. M. A, junto con sus respectivos hijos que se encontraban en la puerta realizando labores de vigilancia, consiguieron impedir la huida de los nigerianos a golpes y utilizando uno de ellos una barra, y los introdujeron en la nave "con clara intención de darles un escarmiento".
Una vez en el interior, inmovilizaron a los estafadores con cinta de embalar y sujetaron a uno de ellos a una estantería, sin que "en ningún momento" intentaran llamar a la Policía o a la vigilancia privada del polígono industrial, y cerraron la puerta con llave pese a estar inmovilizados los timadores.
La retención duró unos quince minutos, hasta que a las 23.01 horas hizo acto de presencia una dotación de la Policía Nacional, alertada por el vigilante del polígono que apreció lo ocurrido a través de las cámaras de seguridad.
Los acusados impidieron la entrada de los agentes durante tres minutos, pese a las "insistentes llamadas y requerimientos", según los jueces.
Por ello, los dos empresarios y sus dos hijos son condenados a seis meses de cárcel por un delito de detención ilegal, si bien con la eximente de legítima defensa pues "al retener a los ciudadanos nigerianos actuaron en la creencia errónea de estar obrando lícitamente en la defensa de sus intereses".
Asimismo, les imponen una multa de 180 euros por dos faltas de lesiones por los hematomas causados a los retenidos, a cada uno de los cuales además deberán indemnizar en mil euros.
Recoge la sentencia que, pese a que los empresarios declararon haber entregado 100.000 euros a los nigerianos, la Policía solo recuperó 86.100 euros.