Quieren pedirle que no afecte a la cobertura social ni al impulso a la actividad productiva
Los sindicatos UGT y CCOO en Andalucía han anunciado hoy que solicitarán una reunión con el presidente de la Junta, José Antonio Griñán, para exponerle sus propuestas sobre el plan de ajuste del gasto público y pedirle que no afecte a la cobertura social ni al impulso a la actividad productiva.
En rueda de prensa, los secretarios regionales de UGT, Manuel Pastrana y de CCOO, Francisco Carbonero, han expresado su rechazo a la congelación de las pensiones y a la rebaja salarial para los empleados públicos y han confirmado que están convocados a la huelga en el sector publico, el 8 de junio, casi medio millón de personas que trabajan en Andalucía en las administraciones local, autonómica y central.
Antes del paro del 8 de junio, esta tarde tendrán lugar en todas las provincias andaluzas concentraciones sindicales.
Ambos líderes sindicales han reivindicado la figura de los empleados públicos, de los que la mayoría trabajan en los ámbitos de la salud, la docencia y los servicios sociales, ya que "ha llegado el momento de poner rostro a estas personas" para hacer frente a una "imagen peyorativa" que se ha creado, en palabras de Pastrana.
Según los datos aportados por los sindicatos, de los 257.234 empleados públicos que trabajan en Andalucía para la administración autonómica, sólo 27.000 desarrollan su trabajo detrás de un mostrador o de una ventanilla, y la mayoría está en áreas relacionadas con la salud, la docencia y los servicios sociales.
Los sindicatos consideran que se deben adoptar medidas para reducir el déficit público, pero deben ser más "equilibradas y proporcionadas a los niveles de renta sea cual sea la procedencia de esa renta", y no que se haga "a costa sólo de los trabajadores".
Con ese objetivo UGT y CCOO pedirán una reunión con Griñán para la próxima semana en la que quieren presentarle sus propuestas de recorte del gasto.
En este sentido, Pastrana ha precisado que Andalucía no debe seguir el modelo de ajuste del Gobierno central en la parte que dependa de sus competencias y para ello pedirán que la reducción de gasto que tienen que acometer las comunidades autónomas no afecte a la cobertura social ni al impulso de la actividad productiva.
Carbonero ha sido especialmente crítico con la política económica del gobierno y ha recordado que los sindicatos se opusieron en su día a medidas como el cheque bebé y a "regalar a los ciudadanos 400 euros", ya que debido a esa "política fiscal populista las arcas públicas ahora no tienen dinero".
"No se puede gobernar un país rectificando permanentemente", ha denunciado el dirigente de CCOO, quien ha advertido de que la anunciada rebaja salarial de los funcionarios ha "dilapidado" el histórico acuerdo de negociación colectiva alcanzado en el ámbito estatal entre los empresarios y los sindicatos por tres años.
Pastrana ha criticado la "incapacidad de la clase política" para alcanzar un acuerdo contra la crisis y ha advertido de que "mienten" los que defienden una "reforma laboral entendida como la pérdida de derechos laborales como condición para salir de la crisis".
Ha dejado claro que, si no hay posibilidad de acuerdos con el gobierno en relación con las medidas de ajuste ni con la patronal sobre la reforma laboral, el próximo día 27 de mayo los máximos órganos confederales de UGT y CCOO llamarán a los trabajadores a la huelga general.
Si llega ese momento "ahí quiero ver a los que han jaleado a favor de una huelga general para usar a los trabajadores como brazo armado de sus intereses políticos", ha afirmado Manuel Pastrana.