La Cofradía de pesacadores de Noia (A Coruña) ha insistido en que la Xunta debe paralizar el plan para vaciar las aguas de la mina de San Finx --en Lousame (A Coruña)-- ante el inicio de los trabajos para instalar una planta de achiques.
Después de que Ecoloxistas En Acción alertase el pasado miércoles del arranque de los trabajos por parte de la empresa australiana Pivotal Metals, la cofradía noiesa ha remarcado este jueves que la Administración autonómica debe "dar marcha atrás" en su autorización a esta actividad que, como remarcan, provocará el vertido de "cientos de miles de metros cúbicos" de agua "cargada con metales pesados" a la ría de Muros e Noia.
Así, califican el vaciado de la mina, que podría empezar "antes del verano", de "acción ilegal y temararia" que acarreará "un irreparable daño a la biodiversidad y riqueza" de la ría, así como la puesta en riesgo "de la gente del mar y de los sectores estratégicos para la economía local".
"Se trata de una actuación había sido de la ley ya que la actividad no fue sometida a la evaluación de impacto ambiental y el proyecto no preveía ningún tipo de tratamiento para el agua contaminado con metales pesados", ha añadido la cofradía, que recuerda que están pendientes de resolución los recursos de alzada contra la autorización de vertidos y que, además, están incoadas diligencias "contra los funcionarios y altos cargos responsables".