La presentación del “Cancionero” comenzó, como todos los actos de la vigésimo quinta Feria del Libro de Cádiz, con la voz del poeta Miguel Hernández, a quien se ha dedicado esta edición, en el centenario de su nacimiento.
La vicepresidenta de la Fundación Provincial de Cultura de Diputación, Ana Mosquera, destacó la labor de la investigadora “que contribuye a conservar la herencia oral que recibimos de nuestros antepasados y mantener este tesoro de la cultura popular”.
El libro, que contiene mas de mil cien temas, ha sido editado conjuntamente por los Servicios de Publicaciones de Diputación y de la Universidad de Cádiz, y fue el director de este departamento académico, el profesor Gonzalo Butrón, el encargado de dar paso a la intervención del estudioso del folklore y flamencólogo José María Velázquez-Gaztelu quien alabó la obra en su totalidad “desde lo acertado de la portada, un grabado de Gustavo Doré, que representa a una familia, origen de la tradición cantada y a partir de la cual nace la cultura popular”, y estableció la relación entre la copla popular y otras manifestaciones: “la copla que llega al flamenco no tiene vuelta atrás”, resumió.
La autora, que anunció la próxima edición del cancionero infantil de la provincia de Cádiz, reconoció que la vida es ahora “diferente y mejor, porque las muchachas ya no tienen que ir al río a lavar los pañuelos de los novios, ni hay cuadrillas de jornaleros cantando cuando van a la faena, pero sus cantos no se pueden perder, porque son señas de nuestra identidad”.
El folklorista Paco Vegara cerró el acto entonando unos cantos de saloma, los mismos que cantaban los pescadores en las almadrabas, coreados por los asistentes que llenaban el salón de actos del Baluarte de la Candelaria.
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