Muchas empresas españolas han adoptado un modelo mixto en materia de asesoría jurídica, contable, laboral, fiscal y tributaria. A pesar de que muchas compañías conservan departamentos especializados en sus estructuras, existe un fenómeno de externalización complementaria de estos servicios.
El departamento legal es uno de los que más trabaja de forma conjunta con asesores externos. Según el periódico El País, ocho de cada diez empresas medianas y grandes cuentan con uno o dos profesionales del derecho en su plantilla. Sin embargo, la mayoría de estas organizaciones también contratan los servicios jurídicos de abogados para empresas. La experiencia de la firma de tiene mucho que ver con el éxtio de la empresa, por lo que es importante considerar aquellas que ya tengan experiencia en el sector, como el caso de Labe Abogados.
¿Por qué las empresas contratan servicios legales de profesionales independientes?
La adopción de este modelo híbrido se debe principalmente a dos motivos. El primero de ellos es la falta de personal. Un departamento legal pequeño no puede hacerse cargo de todas las cuestiones jurídicas que debe manejar una empresa.
El segundo de ellos es la búsqueda de un servicio especializado. Los abogados que trabajan dentro de las empresas suelen tener un perfil generalista, ya que deben resolver conflictos de distintos fueros. En cambio, los abogados que da asesoría externa en materia comercial están especializados en el área.
De hecho, muchas compañías recurren a servicios legales ante la ocurrencia de algún problema con el que los profesionales de la compañía no pueden lidiar debido a su especificidad. El trabajo conjunto entre los abogados internos y externos da muy buenos resultados.
Al momento de abordar una problemática, los abogados internos suelen aportar mucha información clave sobre el funcionamiento de la empresa y las particularidades del conflicto, mientras que los abogados externos cuentan con todo el conocimiento sobre las novedades legislativas y jurisprudenciales que se necesita para resolverlo.
¿Cuándo recurren a la asesoría jurídica externa las empresas?
Las compañías pueden recurrir a abogados para empresas en cualquier momento, desde antes de la constitución de la persona jurídica hasta después de su extinción. Siempre es recomendable consultar a los expertos de forma preventiva para evitar inconvenientes.
Modificación estructural de empresas
A lo largo de su vida, las compañías experimentan cambios de distinta magnitud. La adquisición y la fusión de empresas son dos procesos que modifican la estructura social de las organizaciones y requieren la intervención de abogados.
La adquisición de una compañía consiste en la toma de control de la sociedad. Se puede llevar a cabo por medio de la compra de toda la empresa o de la mayoría de sus acciones. Por otro lado, la fusión implica la unión del patrimonio de dos o más empresas para crear una nueva compañía.
La fusión puede realizarse de dos formas diferentes. La primera consiste en que una empresa absorba el capital social de las demás y mantenga su personalidad jurídica. La segunda se trata de la extinción de las compañías originarias y la transmisión de sus patrimonios a una nueva sociedad.
Antes de llevar a cabo una modificación estructural es recomendable que las compañías realicen una evaluación independiente y objetiva de la información contable y financiera de cada organización, la cual es ofrecida por Legalnet, una empresa especializada en auditorías. Esta evaluación conocida como “assurance” forma parte del servicio de auditoría para empresas y sirve para identificar los riesgos empresariales.
Constitución de franquicias
Según la Asociación Española de Franquiciadores, 24.2% de las empresas del país han adoptado un modelo de franquicias para expandir su negocio. Mango, Pressto, 100 montaditos, Naturhouse y DIA se encuentran entre las franquicias más rentables del mundo.
La constitución de franquicias no es una tarea simple. Las empresas necesitan asesoría letrada para saber cuáles son los requisitos para constituir una franquicia, cómo es el procedimiento de constitución y de qué forma se debe elaborar un manual de estilo, entre otros aspectos.
Negociación de contratos
Las empresas firman contratos con sus proveedores, clientes y trabajadores constantemente. Estos acuerdos rigen las relaciones entre las partes y sus cláusulas pueden ser más o menos favorables para las compañías.
Los abogados para empresas se encargan de redactar contratos desde cero, incorporando cláusulas que protejan a sus clientes. También se ocupan de negociar condiciones del contrato beneficiosas para ellos.
Además, deben revisar los documentos elaborados por la otra parte con el fin de verificar que no hay ninguna cláusula perjudicial para sus clientes. Por ejemplo, la incorporación de una cláusula leonina que establezca intereses moratorios elevados o la fijación de jurisdicción extranjera para la resolución de conflictos.
Constitución de sociedades offshore
Además de constituir sociedades a nivel nacional, existe la posibilidad de crear empresas en el extranjero. Hay abogados especialistas en la constitución de sociedades “offshore”, que conocen en profundidad la normativa de los países que ofrecen beneficios fiscales para los empresarios.
Los abogados para empresas también pueden dar asesoramiento sobre protección de datos, registro de marcas y patentes, emisión de deuda, y derecho de la competencia. Algunos equipos de profesionales también cuentan con especialistas en Derecho Laboral que dan asesoría en materia de contrataciones y desvinculaciones.
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