El presidente de Aspromonte, José Ignacio Torres, calificó hoy como "limpieza étnica en CajaSur, dirigida contra los empleados y la entidad", la opción de ajuste de plantilla que, de forma especialmente orientada hacia la caja cordobesa, se pretende poner en marcha para llevar a cabo la fusión con Unicaja.
En declaraciones a Europa Press, Torres aseguró que esa es la conclusión que se extrae de la reunión, que, a juicio del sindicalista, "ha sido un desastre, con más de lo mismo por parte de la empresa, pero peor aún para los trabajadores de CajaSur", pues se les pretende aplicar, antes de cualquier medida de reducción de plantilla, una bajada lineal de los sueldos, hasta sumar 10,8 millones de euros al año.
Con el argumento de que, además, la situación de la caja cordobesa es peor de lo previsto en cuanto a las pérdidas registradas al cierre de 2009, "la empresa pretende aplicar un ERE, pero sólo en CajaSur, si es que no se alcanza una reducción de costes laborales de más de 43 millones de euros" en la caja cordobesa. En Unicaja el ahorro de costes perseguido es de unos 13 millones y se podrá lograr con un ajuste de plantilla sin medidas traumáticas.
En CajaSur, en cambio, la primera fase de reducción de plantilla que quiere aplicar la empresa prevé prejubilaciones voluntarias para los empleados de 55 años en adelante, que se irían con entre el 65 y el 70 por ciento del sueldo. A ello se sumarían "otras medidas voluntarias para ciertos puestos amortizables", pero, si aún así no se logra el ahorro marcado, "se irá a la tercera fase, el ERE, pero sólo en CajaSur, en una clara demostración de que se persigue a la los trabajadores y a la entidad".
La responsabilidad, en ese caso, según subrayó el presidente del sindicato mayoritario en CajaSur, "será de la Junta de Andalucía, del Banco de España y de todos los gestores de la caja".
Movilizaciones y contraoferta
La reacción, ahora, según anunció Torres, será la convocatoria de movilizaciones, al menos en CajaSur, "pues el resto de sindicatos de la mesa laboral dice que no es el momento", pero la ejecutiva de Aspromonte lo tiene claro y ha convocado para el lunes a sus 71 delegados de personal, para que decidan al respecto.
Sin embargo, el sindicato, según dijo a Europa Press, por su parte, el vicesecretario de Relaciones Exteriores de Aspromonte, Antonio Luis Cuesta, pretende evidenciar, hasta el final, que tiene propuestas "para conseguir el ahorro en costes laborales que persigue la empresa, de 56,7 millones, pero sin medidas traumáticas", y hoy mismo las ha presentado en la reunión de la comisión reducida.
Básicamente, Aspromonte propone aplicar "un procedimiento de desvinculación colectivo, que para la empresa resulta ventajoso desde el punto de vista fiscal", ofreciendo prejubilaciones, con un 85 por ciento del sueldo para los empleados de CajaSur de entre 56 y 60 años, estimando que se acogerán a la medida 382, y con un 90 por ciento del sueldo para los mayores de 60 años (unos 40 empleados más).
A estos 427 trabajadores de la caja cordobesa habría que sumar "los 236 empleados de más de 60 años de Unicaja que la empresa se ha fijado como objetivo", siendo preciso que, del colectivo de trabajadores de la caja malagueña de entre 56 y 60 años, que suman 467, se acojan a la prejubilación voluntaria un 38 por ciento de ellos, es decir 181. El resultado, según Cuesta, es que "los objetivos económicos que persigue la empresa son alcanzables sin medidas traumáticas".