Un joven asesta dos puñaladas mortales a su padrastro para defender a su madre biológica
Vecinos de la calle Mirlo de la barriada sevillana de Los Pajaritos, donde en la noche del jueves un joven de 21 años acabó con la vida de su padrastro asestándole dos cuchilladas, aseguraron ayer que el presunto autor del crimen era esquizofrénico, y expresaron su "miedo" tras los hechos ocurridos.
En declaraciones a Europa Press Televisión, un vecino del agresor -que vivía junto a su padrastro y su madre biológica en el Bajo Izquierda del número 33 de la calle Mirlo-, Iván, explicó que los hechos ocurrieron tras una discusión del hijastro de la victima con éste, "hasta que llegaron a las manos y lo asesinó".
En este sentido, señaló que la familia "era problemática" porque el presunto autor del crimen estaba "enfermo, tenía esquizofrenia", a lo que sumó que en el vecindario "se llegaba a pensar que alguna vez ocurriría algo parecido" porque constantemente se escuchaba "tirar muebles y cacharros". "El niño estaba enfermo y cuando dejaba la medicación venían los problemas", admitió.
En cuanto a los hechos, Iván indicó que "se escuchó jaleo y a la madre chillar", por lo que una vecina dio aviso a la Policía. "A las tres de la madrugada nos enteramos de que había matado al novio -en relación a la pareja de la madre del supuesto asesino-. Fue todo muy rápido, visto y no visto", indicó, al tiempo que negó conocer el motivo que originó la discusión que terminó con la vida de este hombre.
No obstante, este vecino aseguró sentirse "consternado" por lo ocurrido, al tiempo que admitió sentir "miedo" de lo que pueda llegar a hacer el detenido. "Si este chiquillo vuelve, que esté más vigilado porque tenemos miedo. Tenemos las de perder y nos podemos buscar una ruina porque es una persona enferma", reiteró.
Por su parte, otro vecino de la zona, José, hizo hincapié en que la muerte de este hombre "se veía venir". Además, indicó que "esta muerte se podría haber evitado" si el hijastro de la victima hubiera estado internado en un centro, después de las advertencias de los vecinos tras "el jaleo" que protagonizaba.
Agentes del Cuerpo Nacional de Policía detuvieron al presunto autor del crimen, un joven de 21 años con antecedentes, quien confesó a los agentes que había asestado a su padrastro dos cuchilladas para "defender" a su propia madre biológica durante una disputa entre la pareja.
De este modo, el joven detenido habría escuchado la disputa entre su padrastro y su madre, por lo que decidió mediar para evitar que su madre sufriera agresión alguna, momento en el que asestó dos cuchilladas al hombre que acabaron con la vida del mismo en el acto.