Acoge el Bernabéu uno de esos encuentros señalados desde que se da a conocer el calendario de la temporada. Un derbi madrileño vital para el Real Madrid en su carrera hacía el título y de trascendencia para el Atlético si quiere culminar su remontada en Liga, para obtener un impulso moral que le empuje a luchar por puestos europeos.
Llega el Real Madrid a la cita en su mejor momento de la temporada. Superado el fracaso europeo y centrado en conseguir una Liga que salve su año. Con diez triunfos consecutivos y en nueve de ellos marcando tres o más goles. Una pegada que se representa en los 22 goles del Pipita Higuaín y los 17 de Cristiano Ronaldo.
Con 78 goles en total, el Real Madrid de Manuel Pellegrini va camino del récord histórico de 107, con John Benjamin Toshack en el banquillo. Le falta diez partidos. Diez finales en las que el título está en juego.
Para la primera de ellas, ante el Atlético, pierde Pellegrini a Ezequiel Garay en el centro de la defensa y su ausencia provoca cambios en la zaga. Es la única zona donde el chileno introducirá modificaciones respecto al equipo que goleó en Getafe el pasado jueves.
La entrada de Marcelo en el lateral izquierdo manda a Álvaro Arbeloa al derecho y a Sergio Ramos a liderar la defensa desde el puesto de central. El buen encuentro de Fernando Gago le mantendrá en el medio centro, aprovechándose de la baja por lesión de Lass Diarra.
El francés engrosa una larga lista de ausencias madridistas. Se mantienen en la enfermería Pepe, Royston Drenthe, Kaká y Karim Benzema. Por lo que Pellegrini, que recupera para el banquillo a Mahamadou Diarra, se ve obligado a citar a dos canteranos -Marcos Alonso y Pedro Mosquera- para completar su lista de 18.
A dos jornadas de un clásico con el Barcelona que se perfila decisivo, hay dos pilares madridistas como Sergio Ramos y Xabi Alonso que están apercibidos de sanción. A una amarilla de cumplir ciclo todas las partes aseguran que no hay nada planeado, pero no sería de extrañar si reciben la cartulina ante el Atlético y no viajan a Santander para enfrentarse al Racing.
La necesidad de ganar madridista la tiene también un Atlético que busca una victoria en el derbi, porque ya lleva diez años y cinco meses sin ganar al Real Madrid (quince partidos con cinco empates y diez derrotas) y porque su persecución de las seis primeras posiciones de la clasificación exige un triunfo para reforzar sus opciones europeas vía Liga.
El equipo rojiblanco mira a esa zona de la tabla a cinco puntos, su menor desventaja respecto al sexto puesto de los últimos seis meses, tras imponerse el pasado jueves al Athletic Club (2-0) en un encuentro en el que tiró de pegada en ataque y de las paradas de David de Gea para avanzar hasta su mejor posición del curso: octavo.
Pero su seguridad reciente en el Vicente Calderón, con cuatro victorias consecutivas como local, entre ellas a Barcelona (2-1) y Valencia (4-1), se transforma en fragilidad cuando juega en campo contrario.
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