Ha tenido que llegar el ministro de Industria, Turismo y Comercio, Miguel Sebastián, a corroborar lo que todos los gaditanos saben desde hace muchos años. La cesta de la compra en Cádiz es ostensiblemente más cara de lo normal. Según el primer informe del Observatorio de Precios, aquel que prometió Zapatero en uno de los debates televisados de la campaña electoral, las tiendas y supermercados de Cádiz son un 18% más caros que los más baratos de España, localizados en Salamaca, Zamora y Orense. La capital gaditana se sitúa en un vergonzoso segundo puesto de una lista con 56 localidades. El lugar más caro de todo el país, Bilbao; y el tercero, Valencia. No hay duda de que la renta media de los bilbaínos y los valencianos está a años luz de la de los gaditanos, por encima, aunque a la hora de comprar comida y productos de la casa se pague lo mismo.
El Observatorio de Precios, que no servirá más que para observar los precios, se convierte con este primer informe en una herramienta útil para señalar a los comercios gaditanos. Son caros, muy caros, para la ciudad en la que se encuentran, para los clientes que tienen. Aunque el estudio indica qué supermercados son los más asequibles para según qué productos, también se genera la importante duda de la diferencia de precios en los supermercados de las mismas cadenas. ¿Por qué la leche es más barata en un DIA que en otro? ¿Y el pan o el aceite puede variar de un Covirán a otro? Los responsables de los supermercados y tiendas, incluidos los más baratos de la ciudad, le deben una explicación a los gaditanos. Nadie entiende cómo puede la comida ser más cara en Cádiz, si no se argumenta que existe un abuso desmesurado por parte de los responsables de estos establecimientos.