La incorporación de diez militantes nacidos en los 70 en la dirección del PP regional ha provocado que tanto PSOE como IU se atribuyan la iniciativa en el relevo generacional e incluso acusen a Javier Arenas de copión.

Así, el secretario de Organización del PSOE-A, Rafael Velasco, consideraba ayer que el presidente del PP-A, Javier Arenas, es un “copión” que además “sigue la estela” del presidente de la Junta, José Antonio Griñán, al haber anunciado una renovación generacional.

En declaraciones a los periodistas, Velasco afirmó que le ha “hecho gracia” el anuncio de renovación en el Comité Ejecutivo del PP realizado por Arenas, donde se incorpora a jóvenes dirigentes de la generación de los 70.

“Arenas se levanta, ve lo que hace Griñán y lo copia”, subrayó Velasco, que criticó que el presidente del PP andaluz “sigue la estela de todas las iniciativas relevantes” del presidente de la Junta, aunque matizó que Arenas “malcopia” las propuestas socialistas.

Sin embargo, subrayó que “entre lo original y la copia, los ciudadanos se van a quedar con lo original”, porque la ciudadanía “no quiere a un líder que sólo copia y no tiene ni una sola idea”.

Casi al mismo tiempo y desde Sevilla, el coordinador regional de IU, Diego Valderas, trasladaba tanto al PSOE-A como al PP-A que su formación fue “la primera” en apostar por un relevo generacional en sus filas y en su dirección.

A preguntas de los periodistas en rueda de prensa, el máximo dirigente de IULV-CA aseguró que tanto PSOE-A como PP-A “llegan tarde” a esta renovación, que, según dijo, su formación emprendió tras la celebración de la última Asamblea regional y tras el nombramiento de la nueva dirección colegiada.

En esta línea, Valderas apuntó que cinco de los miembros de la dirección colegiada de IULV-CA son menores de 33 años y que la media de edad de los cargos públicos de la formación ha bajado considerablemente respecto a la anterior legislatura.

En cuanto al Congreso extraordinario del PSOE, que materializará el relevo generacional anunciado por el presidente de la Junta y futuro secretario general, José Antonio Griñán, el consejero de Presidencia y aún vicesecretario de la formación, Luis Pizarro, aseguró ayer que el cónclave “será democrático, no como el que hizo Arenas”, a quien acusó de “sacar en el congreso popular a diez dirigentes para meter otros diez” y de “quitar a Teófila Martínez para meterse él”.

Según el socialista, la actuación del dirigente popular durante el congreso de su partido “no se correspondió con los parámetros democráticos”.

El consejero añadió que en el cónclave socialista “será la unanimidad la que elegirá a Griñán como presidente del PSOE andaluz, tal y como se reflejará en el resultado de los votos individuales y secretos”.

Respecto a las declaraciones del secretario de organización del PSOE-A, Rafael Velasco, en las que respaldaba la permanencia de Pizarro en la dirección del partido, el vicesecretario general señaló que actualmente desarrolla su labor como consejero “al cien por cien”.

“Velasco ha demostrado que no nos equivocamos al elegirle y hará que el congreso salga muy bien, mal que le pese al PP”, afirmó.

Zarrías se despide como secretario de Jaén

Por su parte, el secretario de Política Autonómica y Relaciones Institucionales del PSOE y secretario de Estado de Cooperación Territorial, Gaspar Zarrías, comunicó ayer su intención de abandonar su cargo como secretario general del PSOE de Jaén, que ejercía desde 1994.

En una intervención ante el Comité Provincial del PSOE, Zarrías explicó que aunque desde el punto de vista orgánico los cargos a nivel nacional son compatibles con la Secretaría del PSOE de Jaén, no lo son desde el punto de vista "humano".

Insistió en que el Congreso Extraordinario Provincial, que tendrá lugar en las próximas semanas para elegir los delegados jienenses al Congreso del PSOE andaluz es "el momento oportuno" para elegir a su sucesor.

"No voy a plantear herederos; los herederos los tienen los Reyes y yo soy republicano; seréis vosotros los que decidáis", dijo durante su intervención, en la que insistió en que esta decisión no se tiene que entender "como un punto y final, sino como un punto y seguido" puesto que "esté donde esté, mi compromiso va a ser para con vosotros y para con la provincia de Jaén".

"No suelo escurrir el bulto casi nunca y si en momentos de dificultades puedo aportar algo, lo voy a hacer", advirtió Zarrías, quien señaló que esta decisión la ha venido "madurando" desde antes del Congreso de hace poco más de año y medio en el que logró el 99,65 por ciento de los votos.

Reconoció que se lo volvió a plantear el pasado mes de mayo cuando fue nombrado secretario de Estado de Cooperación Territorial, lo que le obliga a vivir en Madrid.

Su nueva responsabilidad como secretario de Política Autonómica y Relaciones Institucionales del PSOE le ha decidido a dejar la secretaría provincial del partido.

El presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, valoró ayer el "excelente trabajo" de Gaspar Zarrías como secretario general del PSOE de Jaén y consideró que su "relevo" en la estructura orgánica jiennense es "un ejemplo más" de los cambios "tranquilos" que afronta "desde el consenso" el PSOE andaluz.

El presidente andaluz reconoció el "excelente" trabajo desarrollado por Zarrías en Jaén, una provincia que, según Griñán, "siempre ha aportado la mayoría de los votos para el PSOE en Andalucía y España".

Griñán subrayó que el relevo de Zarrías responde a su dedicación a su nuevo cargo como secretario federal de Política Autonómica y Relaciones Institucionales del PSOE.

Destacó que Zarrías ha sabido "proyectar liderazgos" de otros jiennenses como los de Micaela Navarro, Antonio Ávila o Francisco Reyes.

Por su parte, el presidente del PP de Jaén, José Enrique Fernández de Moya, señaló que "el abandono de Zarrías" "es la culminación de una decisión prevista por Griñán, en el marco de la lucha intestina que mantiene el PSOE de Andalucía".

En este sentido, Fernández de Moya afirmó en un comunicado que "Zarrías es la primera víctima política de Griñán y lo que ha hecho el presidente de la junta es darle una patada hacia arriba y endosarle el problema a Zapatero".