El magistrado titular de la Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Córdoba ha condenado a un hombre de 46 años a una pena de 21 años de prisión tras ser declarado culpable por un jurado popular de asesinar a su mujer a martillazos en 2019 en Rute (Córdoba).
La sentencia, a la que ha tenido acceso Efe, señala que concurren las agravantes de parentesco y de género, y la atenuante de confesión, mientras que se le privar al acusado de la patria potestad de sus hijos.
El magistrado, en virtud al veredicto del jurado, considera probado que el condenado estaba casado desde 2005 con la víctima, con la que tenía dos hijos, si bien desde poco tiempo de casados fueron frecuentes desavenencias y fuertes discusiones entre ambos, en las que el condenado profería insultos y sometía a la víctima a situaciones humillantes.
Posteriormente, la mujer comenzó a trabajar en la empresa de su hermano en Granada y tomó la determinación de poner fin a su relación matrimonial, lo que comunicó a su marido en junio de 2019, quien a pesar de haberse mudado a la localidad de Iznájar, seguía acudiendo al domicilio de Rute.
Sin embargo, en julio de 2019, la mujer recibió varias llamadas del condenado pidiendo que volviera al domicilio familiar, cosa que la mujer terminó haciendo sobre las 20.30 horas, cuando comenzó entre ambos una fuerte discusión.
Ya de madrugada, el condenado regresó al domicilio familiar, bajó al sótano donde cogió un martillo y subió al dormitorio donde descansaba su mujer, a la que golpeó dándole tres fuertes puñetazos en la cara y posteriormente propinarle martillazos en el lateral derecho y posterior de la cabeza.
En total fueron siete los golpes de martillo recibidos por la mujer con tal intensidad que produjeron en la víctima una parálisis de los centros vitales nerviosos secundaria a un traumatismo craneoencefálico y encefálico severo que le provocaron la muerte inmediata.
Tras de acabar con la vida de la mujer, el condenado condujo junto a su hija el coche de la víctima hasta Iznájar para recoger a su otro hijo pequeño y luego viajar a Madrid, donde se puso en contacto con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado para informarles de que había acabado con la vida de su mujer.
Envía tu noticia a: participa@andaluciainformacion.es