El autor plantea una solución desde la base del problema: enseñar a estudiar para conseguir el éxito en las aulas y poner fin a datos tan preocupantes como los que estiman que el fracaso escolar afecta al 30% de los alumnos españoles -un porcentaje que incluso puede ser superior en esta ciudad, aunque no haya estudios concluyentes al respecto-, o que España se sitúa en el furgón de cola según el último informe PISA (Programa Internacional para la Evaluación de Estudiantes) en el que han intervenido 62 países.
Las 20 claves del éxito escolar -resultado de los más de 20 años de profunda investigación de Carlos Jurado Caballero- presenta un nuevo sistema con una formulación y filosofía distintas, proponiendo al alumno algo tan sugerente como “estudiar más, mejor, en menos tiempo y de manera más divertida”, según aclaró el propio escritor a este medio.
El método pretende convertirse en un apoyo para los estudiantes en general, en todos sus niveles. El autor explica que “a través de 20 objetivos, podemos conseguir una mejora paulatina y sólida en cada una de las tareas diarias del que estudia. Intentamos ofrecer una visión nueva del estudio que desmonta los argumentos de quienes no quieren estudiar y ayuda notablemente a los que sí quieren hacerlo pero no llegan, o a quienes sufren de lo lindo para ganar un aprobado raspado, o a los que rozan los niveles exigidos pero temen que algún día no llegarán”.
Además, hace hincapié en que “tanto la fórmula como el tono son distintos a lo existente, centrándonos en el cambio de cada una de las percepciones, actuaciones y dificultades reales de cada alumno en el estudio y haciéndolo de una manera asequible y cercana. Estamos convencidos de que la confianza del estudiante se consigue desde la cercanía, haciendo una guía fácil y asequible para conseguir un estudio fácil y asequible, una guía entretenida que se traduzca en un estudio de igual tono”.
Y un detalle no menos importante; el hecho de aprender a estudiar se traduce principalmente en buenas calificaciones y éstas, a su vez, son la clave secreta de nuestra felicidad futura. Eso sí, “la única condición o requisito para iniciarnos en el aprendizaje de un método de estudio es disponer de cierta soltura en la lectura y en la escritura, es decir, aptitudes que se adquieren aproximadamente a partir de los nueve años”.
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