Astilleros de Sevilla exige a la SEPI que anule la venta de 2006

Los trabajadores de Astilleros de Sevilla se manifestaron ayer en la capital para exigir el cumplimiento de la hoja de ruta firmada por la Junta y los empresarios, y pidieron al gobierno autonómico que presione a la SEPI para que anule la venta del astillero, que se efectuó en 2006.

La marcha, convocada por CCOO y en la que participaron cerca de 200 personas, ha comenzado en torno a las 12:00 horas en la Puerta de Jerez de la capital andaluza y concluyó una media hora después frente a la Delegación provincial de Empleo, en la Avenida República Argentina, donde se celebró la reunión entre Rivas y los representantes del comité de empresa.

"La SEPI (Sociedad Estatal de Participaciones Industriales) tiene su responsabilidad, por lo que hemos pedido a la Junta que la presione para que se convoque una comisión de seguimiento urgente y, si no hay otras soluciones, se anule la venta del astillero", aseguró a los manifestantes Vicente Sánches, miembro del comité de empresa de Astilleros de Sevilla.

Sánchez calificó de "fraudulenta" la venta que la SEPI acordó en noviembre de 2006 con la empresa Astilleros de Huelva, y señaló que en aquel momento tanto sindicatos como trabajadores se opusieron a esta operación -que según él es "la que ha llevado a la actual situación"- pero tuvieron que aceptarla porque "no quedaban más narices".

"La administración pública no puede permitir que se destruyan más puestos de trabajo y tiene que utilizar los mecanismos que sea, y si es necesaria la expropiación que se expropie", expresó.

Por su parte, el presidente del comité de empresa, Gregorio Mora, que también señaló a la sociedad estatal como "el primer culpable", apuntó que los trabajadores "no van en contra de la Junta" sino de los empresarios "piratas".

Una de las primeras medidas que debe adoptarse para el cumplimiento de la hoja de ruta exigido por los trabajadores pasa por la designación, a cargo de la Junta, de un administrador único para los astilleros sevillanos.

Por otra parte, advirtió del peligro de que se acabe convocando un concurso de acreedores, que según él es "lo que en realidad quieren los empresarios" y para lo cuál "se han marcado su propia hoja de ruta".

"Llegar a un concurso de acreedores es llegar al cierre de astilleros, con lo que montones de padres de familia se verían en la calle", expresó Mora, y subrayó que "éste no sería el problema de 250 trabajadores sino de una provincia con un alto índice de desempleo y de un sector que puede generar mucho trabajo".

Preguntado por los periodistas sobre si ha existido retraso en el pago de las nóminas a los trabajadores de los Astilleros de Sevilla -tal como ha ocurrido con los de Huelva, que han sufrido una demora de varios meses en el cobro de sus sueldos- Mora indicó que la empresa les ha comunicado a los empleados que este mes no recibirán la paga.

El conflicto se inició hace cinco meses con la salida a la luz pública de los problemas financieros de la empresa, que opera en Huelva y en Sevilla, la sucesión de despidos y la presentación de un Expediente de Regulación de Empleo Temporal.

Soler anuncia medidas legales

Por su parte, el consejero de Innovación, Ciencia y Empresa, Martín Soler, lamentó ayer la "actitud obstruccionista y nada colaboradora" de los empresarios y dueños de la compañía de Astilleros de Huelva, por lo que "si no cumplen con lo pactado, habrá que iniciar acciones legales".

"La empresa tiene un problema grave y el Gobierno andaluz ha estado trabajando muy cerca de trabajadores y dueños para salir de la situación que atraviesa", recordó Soler en una rueda de prensa en Málaga.

En este sentido, criticó que los dueños de la empresa "dificulten la viabilidad de la misma", por lo que "vamos a iniciar todas las acciones legales y administrativas que como Gobierno podemos hacer para que la empresa no cierre y así conservar el empleo".

No especificó cuáles serían estas medidas, ya que optó "por darle una oportunidad para ver si rectifican a lo largo del día".