Perdido en la bulla. Abrumado en el noticiario de las mil cincuenta casetas, ciertos medios de comunicación han omitido su falta. En este mundo no se puede ser discreto, quien lo es corre el riesgo de ser ignorado en su último viaje. Después de haber creado ciento seis asociaciones, entre otras alguna tan importante como la Fundación Blas Infante de la que fue vicepresidente desde su creación hasta su fallecimiento, o tan activas como el Ateneo Popular, que sus sucesores no han sabido mantener, o la Asociación Pro Defensa de la Copla Andaluza, Pedro Ruiz-Berdejo nos ha dejado con la discreción que siempre le ha caracterizado. Si hubiera sido un tertuliano de los programas corraleros de alguna cadena de TV, seguro estaría en todos los informativos. Pero en vida se dedicó despertar conciencias para defender ideas plausibles capaces de hacer mejor un mundo en declive: Eso no es lo que el declive quiere, lo que persigue una sociedad rota y satisfecha por su rotura.
Habría sido íntimo de Blas Infante si no hubiera sido un niño cuando asesinaron al Padre de la Patria Andaluza, pero siempre fue abogado de la familia a la que estaba unido por lazos de amistad entrañable. Le venía de familia. Amigo de sus amigos hoy sus amigos tenemos motivos para llorar su falta y pedir para él el homenaje que las autoridades negaron a su amigo/nuestro amigo José Luis Ortiz de Lanzagorta a quienes el olvidadizo oficialismo ha condenado al olvido. Hay muchos olvidados en esta tierra de la memoria masacrada y la ignorancia voluntaria, porque la ignorancia, fomentada y casi santificada por el poder, podría ser más rentable que la percepción limpia y clara de la realidad. Cuanto menos percepción, menos comprensión, menos conciencia, más libertad tendrán los políticos para decidir sin pensar en sus electores, forzados estos a centrarse en unas campañas limitadas a la conveniencia de los electos y a su demagogia logorreica.
Hoy Andalucía entera debería lamentar la pérdida de Pedro Ruiz-Berdejo, abanderado del andalucismo y enamorado de Andalucía, El que en lo cultural, en lo económico, en lo histórico y en lo futurista, siempre estuvo presto para la defensa de los intereses de Andalucía teniendo siempre presente que Andalucía existe para sí, para Iberia y para la Humanidad.
Envía tu noticia a: participa@andaluciainformacion.es