En pleno centro urbano portuense asistimos al espectáculo insólito de los alambiques en pleno proceso de destilación. Una forma artesanal de destilar bebidas alcohólicas que prácticamente ha desaparecido.
Estamos en destilerías Pico, que se encamina a su segundo centenario y que permanece fiel a la forma de elaboración de la primera mitad del siglo XIX.
La primera botella de Cacao Pico data del año 1824. Con ella empezó todo, incluida la historia del mítico licor que en su origen no tuvo la misma denominación.
Envía tu noticia a: participa@andaluciainformacion.es