El pueblo sevillano de El Castillo de las Guardas ha sido nuevamente el escenario de un enigmático avistamiento que ha dejado perplejos a sus vecinos. Un hecho misterioso que, según los relatos de varios testigos, parece desafiar cualquier explicación lógica. Uno de ellos, Juan Ramírez, vecino de Sevilla, asegura haber presenciado un fenómeno que, en sus propias palabras, "no parece de este mundo". El incidente ocurrió el sábado por la noche, cuando Juan paseaba a su perro en una de las tranquilas calles de la localidad.
Juan relata que, en un primer momento, observó luces de colores intensos y cambiantes que se desplazaban de forma errática sobre el cielo, realizando giros bruscos y movimientos a velocidades incomprensibles. "Las luces se movían de un lado a otro, subían y bajaban, y parecían cambiar de color en cuestión de segundos", comenta Juan. Intrigado y algo asustado, decidió grabar la escena con su móvil, pero el video apenas muestra las luces con la claridad que él pudo observarlas. "Era algo fuera de lo normal, como si estuviera viendo algo de otro mundo. No he visto nada parecido en toda mi vida", asegura, claramente impactado por la experiencia.
Otras personas también han sido testigos de fenómenos extraños en los últimos años. Uno de ellos, Marta Rodríguez, que en varias ocasiones ha visto luces similares en el cielo. "Esto ha pasado antes, pero siempre decimos que son cosas de la noche", comenta Marta, recordando cómo esos avistamientos siempre han sido tema de conversación entre los vecinos más mayores interesados por estos temas. Para ella, las luces en el cielo son algo "inquietante", y aunque ha escuchado teorías sobre drones y fenómenos atmosféricos, siente que lo que vio es "algo más allá de lo que sabemos".
A raíz de estos relatos, más personas del pueblo y sus alrededores se han animado a compartir sus propias experiencias. Entre ellos, Carlos Méndez, un joven que trabaja en las tierras de la zona, cuenta que en dos ocasiones ha presenciado fenómenos parecidos durante sus turnos nocturnos. "Una noche vi algo que me dejó helado. Pensé que eran aviones o helicópteros, pero las luces se movían demasiado rápido y en direcciones imposibles. Ni siquiera había sonido", explica Carlos, quien, al igual que Juan, intentó grabar las luces, aunque el resultado fue poco claro. "No sé qué será, pero no es algo que se vea todos los días", concluye.
Algunos vecinos están convencidos de que las luces son evidencia de visitas de otros mundos y que El Castillo de las Guardas, por su particular ubicación y cielos despejados, podría ser un punto de interés para estos seres. En cambio, otros, como el profesor Manuel Hernández, consideran que es probable que haya explicaciones más racionales: "Estamos en una época donde los drones y la tecnología avanzada son muy accesibles. No sería descabellado pensar que alguien esté probando dispositivos en la zona, o incluso que se trate de fenómenos atmosféricos inusuales", explica Manuel, apelando a la lógica y el conocimiento científico.
Sin embargo, el avistamiento de Juan y los testimonios de otros residentes han despertado una gran curiosidad no solo en El Castillo de las Guardas, sino también en localidades cercanas. Algunas personas interesadas en la ufología han comenzado a visitar el lugar con la esperanza de presenciar algún fenómeno similar, lo que ha dado pie a una renovada conversación sobre la posibilidad de visitas de seres de otros mundos. Este caso ha motivado a varios vecinos a compartir historias que antes guardaban en silencio por miedo al escepticismo, fortaleciendo la idea de que el pueblo es un "punto caliente" para avistamientos extraños.
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