El Castillo del Coronil, en Sevilla, fue un antiguo baluarte medieval, y ha sido un testigo mudo de siglos de Historia, guerras y leyendas. Situado en la Banda Morisca, fue clave en la defensa de la región y residencia de nobles en tiempos pasados. Sin embargo, con el paso del tiempo y tras perder su importancia estratégica, el castillo fue abandonado y olvidado, convirtiéndose en el escenario perfecto para el nacimiento de historias fantásticas que han perdurado en la tradición local.

El Castillo del Coronil, también conocido como Castillo de Las Aguzaderas, fue construido en el siglo XIV sobre una probable base romana o medieval, un enclave defensivo diseñado para controlar el acceso a las fértiles tierras del entorno. Las torres que lo rodeaban, como Cote, El Bollo, Lopera, Alocaz y Llado, eran esenciales para la defensa de la zona y el control de los manantiales cercanos, entre ellos, la fuente de las Aguzaderas. Este conjunto arquitectónico fue clave para la realeza y la nobleza, aunque su gloria fue efímera. Hoy en día, las ruinas del castillo no solo evocan la grandeza del pasado, sino que también albergan algunos de los relatos más fascinantes de la región, siendo la leyenda del guardián la más cautivadora.

La leyenda del guardián: entre lo real y lo sobrenatural

De todas las historias que rodean al castillo, la del guardián es, sin duda, la más enigmática y persistente. Cuenta la leyenda que una figura misteriosa, descrita como "la sombra del guerrero", deambula por los pasillos oscuros del castillo, protegiendo sus secretos y esperando el regreso de su gran amor. Este espectro, según relatan los más viejos del lugar, es el espíritu de un noble guerrero que perdió la vida en defensa del castillo y que, desde entonces, no ha abandonado su puesto de vigilancia. 

En este entorno hay que reconocer el trabajo de investigación y documentación que realizaron las componentes del grupo "Objetivo Paranormal" -Jessi y Peke- y su popularización del caso, ellas fueron las primeras en interesarse y estudiar el mismo.

Manuel, uno de los vecinos más longevos, recuerda una noche especialmente tormentosa cuando, al pasar cerca del castillo, vio una figura alta y oscura, aparentemente vestida con una antigua armadura. "Era como si me estuviera observando, pero en cuanto intenté acercarme, desapareció", asegura. Manuel no es el único. Otros vecinos, como Carmen, una mujer de mediana edad que lleva toda su vida en la zona, afirma haber oído pasos en el interior del castillo en más de una ocasión cuando paseaba por sus alrededores. "No eran animales, eran pasos firmes, como de alguien que vigila", relata. Igualmente las componentes del grupo de investigación "Objetivo Paranormal", pasaron en su día largas jornadas de investigación en este lugar conociendo bien la leyenda y hechos que en su interior acontecen.

Incluso un panel explicativo colocado por la Junta de Andalucía menciona la figura del guardián, alimentando así el misterio y la curiosidad de los visitantes. Este reconocimiento oficial refuerza el arraigo de la leyenda en la cultura local, convirtiéndola en parte fundamental de la identidad del castillo.

La investigación paranormal: buscando respuestas en lo desconocido

Atraídos por la leyenda y los testimonios de los lugareños, un grupo de investigadores paranormales nos adentramos en el Castillo del Coronil. Llevamos tecnología avanzada, como cámaras térmicas, grabadoras de audio y sensores de campos electromagnéticos, y pasamos varias noches explorando las ruinas en busca de pruebas que corroboraran los relatos.

Durante la investigación, se produjeron fenómenos que desconcertaron a mis compañeros. Uno de los momentos más impactantes fue cuando las cámaras captaron lo que parecía ser una figura etérea moviéndose en una de las torres. “Era una forma humana, pero no había nadie más con nosotros en ese momento”, Además, grabaciones de audio revelaron psicofonías apenas audibles que no parecían provenir de ninguna fuente natural, y los sensores electromagnéticos registraron picos de actividad en zonas donde, en teoría, no debería haber ningún tipo de interferencia.

Rosa, una de las investigadoras, recuerda con inquietud una experiencia personal: "Sentí un frío intenso, como si alguien estuviera justo detrás de mí, pero al girarme no había nada. Fue una de las sensaciones más perturbadoras que he experimentado en mi vida". Estas experiencias, aunque inquietantes, no aportaron pruebas concluyentes, lo que dejó la investigación en un estado de incertidumbre.

Explicaciones racionales: ciencia y sugestión

A pesar de los fenómenos extraños observados, muchos creen que estos pueden tener explicaciones lógicas. Los castillos antiguos, como el del Coronil, suelen estar sometidos a cambios estructurales debido al tiempo y las condiciones climáticas. Los crujidos de las paredes y los suelos, el eco generado por las cavidades y los movimientos de las sombras en la noche pueden provocar ilusiones ópticas y auditivas, confundiendo a los más impresionables.

En términos psicológicos, el contexto también juega un papel importante. Lugares oscuros, con historias aterradoras de fondo, predisponen a las personas a percibir cosas que no están realmente allí. Nuestro cerebro, cuando se enfrenta a lo desconocido, tiende a completar la información con elementos de nuestro propio miedo o imaginación, lo que podría explicar muchos de los testimonios sobre el guardián.

Testimonios que desafían la razón

Sin embargo, algunos de los relatos de quienes han visitado el castillo van más allá de lo que la ciencia puede explicar fácilmente. José, un visitante que pasó una noche cerca del castillo, asegura haber visto una luz flotante en la distancia. "No era una linterna ni nada que se pudiera explicar con lógica. Estaba demasiado alto, y cuando intenté enfocarla mejor, desapareció sin más", asegura. Este tipo de testimonios son los que mantienen viva la creencia en lo paranormal, y hacen que el Castillo del Coronil siga siendo un punto de atracción para los amantes del misterio.

A día de hoy, el Castillo del Coronil sigue desafiando nuestra comprensión. Las leyendas, como la del guardián, continúan atrayendo tanto a curiosos como a investigadores en busca de respuestas. La combinación de historia, misterio y lo inexplicable ha hecho de este lugar un punto de referencia en la cultura local y un enigma para quienes buscan comprender los límites entre la realidad y lo desconocido.

Tal vez, en algún momento, los avances en tecnología y ciencia nos permitan desentrañar completamente los misterios del castillo. Pero hasta entonces, el guardián seguirá siendo una figura envuelta en sombras, una parte inseparable de la identidad de este imponente castillo.

 

*Si quieres más información puedes encontrarla en el libro "Guía misteriosa de castillos y palacios abandonados de España" (Ed. Almuzara, 2024, Jose Manuel García Bautista).