El jardín de Bomarzo

Con su mirada

La luz es especial cuando alumbra septiembre. Amanece después, anochece antes, las tardes de calor aún contrastan con la vuelta al cole

Publicado: 06/09/2019 ·
14:29
· Actualizado: 30/09/2019 · 18:22
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Bomarzo

Bomarzo y sus míticos monstruos de la famosa ruta italiana de Viterbo en versión andaluza

El jardín de Bomarzo

Todos están invitados a visitar el jardín de Bomarzo. Ningún lugar mejor para saber lo que se cuece en la política andaluza

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"Nunca deberían habernos dado uniformes si no querían que seamos un ejército". De la serie El cuento de la criada.

La luz es especial cuando alumbra septiembre. Amanece después, anochece antes, las tardes de calor aún contrastan con la vuelta al cole en un país que se despereza del verano, de la levantera, de un agosto calórico donde, quien más quien menos, soltó agujero del cinto porque el chiringuito es como una voz desde el más allá ante la que uno a sus pies se arroja con desesperada entrega. La pereza del retorno al despertador de la vida obrera, que es la vida a Dios gracias, es muy de este mes de color azul suave; para ganarla se recomienda alejarse de otros perezosos, o sea de casi todo el mundo, empezar por las cosas simples e ir paso a paso, haciendo una lista de temas pendientes y valorando los beneficios de una cosa bien hecha. Ya. Sobre el papel, perfecto, pero mejor sin duda la barra de aquel chiringuito -piensas-sobre dorada arena de litoral de Cádiz, provincia epicentro del mundo en verano, donde la mezcla de vistas, sabores y brisa a uno le confirman que la felicidad sin duda veranea en Cádiz, provincia -la Felicidad, la Carmen, la Paqui...-.

También empiezan las cosas en septiembre, y empezar está bien. Aquellos que cerraron sus negocios abren para que la vida, en pocos días, vuelva a su agitación habitual, y una vez agitadas prestas otra atención a los informativos y, de hecho, es por esto que algunos aprovechan agosto para tomar decisiones menos populares a sabiendas de que el público en general anda en la playa y a otra cosa, atentos sobre todo a que los excesos no deformen la goma del bañador y/o bikini. Pero todo se acaba, llega septiembre y con él el regreso, la vuelta al cole, al verde de la ensalada y el brócoli con los gimnasios a rebosar, y la vida política, esa que tantas líneas para tan escaso rendimiento llena, vuelve bronceada para continuar lo que dejó sin terminar. Casi todo.

Salvo error u omisión, Pedro Sánchez quiere volver a sacar las urnas a la calle y para ello está manteniendo un paripé que ronda lo indecente con Pablo Iglesias sabiendo que las encuestas, esas que no para de encargar, le ofrecen una notable mejoría con respecto a lo que sacó hace unos meses y es así a costa de Unidas P, que desciende. Sánchez, con un bronceado medido porque tampoco es plan de regresar negro como una mohama de Barbate, se ha construido un relato cuyo capítulo final termina en elecciones, esa que tantos otros temen. La temen Ciudadanos, que no sale de un discurso incomprensible por parte de Albert Rivera y una cada vez más tocada Inés Arrimadas, que si hay convocatoria verán como la formación naranja cederá posiciones en favor del PP, el otro beneficiado. No tanto como el PSOE, pero también crecerán en esa idea general asentada del regreso al principio del bipartidismo visto que la fragmentación parlamentaria lo único que trae es esto, división, acuerdos imposibles, mucho ego y mucho personalismo por encima del interés general.

Y si hay repetición de elecciones será momento también de confeccionar de nuevo las listas, no tienen por qué repetirse nombres y puestos porque la vida ha variado desde hace unos meses e, igual, hay sorpresas. De hecho, entre entonces y ahora se han celebrado elecciones municipales y esto siempre termina por alternar determinadas situaciones, lo que preocupa, o ilusiona, depende, a más de uno. O una.

Distinto es lo que sucede en Andalucía, donde tambores lejanos anuncian que la contienda se aproxima en el PSOE. Susana Díaz aprovechó los finales de julio para finiquitar sus discrepancias con Mario Jiménez y le apartó, de un tajo, como también hizo después con dos parlamentarias más críticas a ella y representantes de dos provincias díscolas como son Jaén y Huelva sacando del escenario a María de los Ángeles Ferryz y a María Márquez, de lo cual ha tomado nota tanto Ferraz como el presidente de Diputación de Jaén y secretario general Paco Reyes, estos días en Haití, y entre todos ya comentan a boca abierta que la muerte del susanismo al final no la va a provocar el sanchismo sino el susanismo defenestrado, de lo cual el entorno de Pedro Sánchez está encantado. Y aunque el círculo íntimo de Díaz ande estos días promulgando que no pasa nada y que todo está bien, hasta los gatos del entorno de San Vicente saben que esto no es así y que cada día que pasa pierden adeptos; entre los que pierden y los que matan, más el hecho de que no es lo mismo controlar el partido con el BOJA en la mano que sin el BOJA en la mano, el horizonte se plantea gris con tendencia a oscurecer como Pedro Sánchez mejore resultados en una nueva convocatoria electoral y mande a Andalucía a María Jesús Montero. Que es lo que muchos ya piden en voz alta.

El siguiente elegido por Díaz para engordar la lista del susanismo defenestrado para corte capilar es, parece, el ahora apartado del círculo de confianza Miguel Ángel Vázquez, que fuera portavoz de su gobierno y consejero de Cultura después. Solo queda por tanto que les empiecen a repartir uniformes para que, como en mi serie del verano, se conviertan en ejército y a pesar de que al cruzarse la saluden con el habitual Con su mirada, por dentro solo vean la manera de escapar de aquello. El miedo es un método eficaz de control, escapar de él un objetivo universal.

El cuento de la criada es una de las series preferidas por Pablo Iglesias, muy aficionado a éstas y por lo que parece con tiempo suficiente para dedicarse a pesar de tener un gobierno por pactar. Relata un mundo cruel -la República de Gilead- dominado por una tiranía masculina, por la religión extrema donde las mujeres no pueden leer ni escribir y las denominadas criadas circulan bajo tocados enormes y son violadas en nombre de Dios en una ceremonia mensual. Un espanto extremo que te hace valorar mucho mejor este nuestro mundo libre donde nadie nos vigila, las mujeres no son violadas ni torturadas, los hombres en su conjunto entienden el principio de igualdad absoluta y los gobiernos solo se rigen por el sentido de la democracia sin fisuras...

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