La Policía Nacional ha detenidos a dos hombres y se ha incautado de 183 kilos de hachís tras desmantelar una red de tráfico de esta sustancia que operaba en fincas que ya habían sido utilizadas previamente para este propósito en el municipio almeriense de El Ejido.
Según una nota de la Comisaría de Almería, los investigadores sospechaban que una finca ubicada en las inmediaciones de 'La balsa del sapo', en El Ejido, que ya había estado relacionada en el pasado con el tráfico de estupefacientes, podría seguir usándose como centro de operaciones de una red local de narcotráfico.
La policía tenía indicios de que al lugar se acercaban remolques repletos de verdura para añadir a su carga esta sustancia estupefaciente.
Por ello planificaron un dispositivo de vigilancia discreta prolongado en el tiempo sobre el lugar, que derivó en la identificación de un viejo conocido de la policía. La actitud de esta persona era sintomática de su "rol predominante en la organización", al planificar los envíos y adoptar medidas de seguridad.
Cuando intensificó estas últimas, los agentes intuyeron que se avecinaba un nuevo cargamento.
A la finca accedió un tráiler que se mantuvo en su interior aproximadamente una hora. Al salir los agentes decidieron intervenir e inspeccionar el vehículo, encontrando en bolsas termoselladas escondidas entre las hortalizas 182,72 kilogramos de hachís.
Esto provocó la detención del transportista, que fue puesto a disposición del Juzgado de Instrucción 3 de El Ejido, en funciones de guardia. Este órgano decretó prisión provisional para el detenido, que acabó saliendo en libertad provisional a las dos semanas.
El "cerebro de la operación, que pensaba haber eludido la acción de la Policía", fue detenido apenas una semana después, acusado de un delito contra la salud pública. En esta ocasión el Juzgado de Instrucción 3 de Almería también decretó prisión provisional para éste.
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