El Almería ascendió a Primera División siete años después de perder la categoría tras empatar 2-2 en Butarque frente al Leganés y gracias a un tanto del Alcorcón, que superó al Eibar en el tiempo añadido para premiar al conjunto andaluz.
Un nombre entrará en la historia del Almería y no será del club. Jorge Giovanni Zarfino, jugador del Alcorcón, será el héroe del ascenso. Con su tanto al Eibar, salvó una tragedia para el equipo de Rubi, que estuvo a un paso de morir en la orilla de la máxima categoría.
El sur de Madrid casi fue la "tumba" de los hombres de Rubi. Hace una semana, se quedó sin ascenso tras empatar, precisamente, ante el Alcorcón (2-2). Y siete días después, volvió a empatar en Leganés, a sólo doce kilómetros. Sin embargo, el fútbol se congratuló con el cuadro almeriense y la maldición madrileña se convirtió en bendición con el tanto de Zarfino.
Y es que, el Almería decidió jugar con fuego durante casi todo el partido. Dependían de sí mismos para acabar con siete años de destierro en Segunda División y saltaron al césped del Estadio Municipal de Butarque dispuestos a jugar a la ruleta rusa. Se echó demasiado arriba y dejó demasiados huecos. Se mostró irregular en ataque y peor en defensa. Y eso, en la primera parte, fue un lastre. El Leganés, aprovechó las dudas de su rival y se marchó por delante en el marcador al descanso.
El atrevimiento del Almería provocó un duelo de ida y vuelta del que salió vencedor el conjunto madrileño. Por lo menos, en el acto inicial, en el que aprovechó mejor sus golpes, bastante más numerosos que los del equipo de Rubi, incapaz de manejar el encuentro más importante del curso.
El Leganés, sin nada en juego y sin presión alguna, firmó un duelo atractivo que no deseaban los aficionados del Almería presentes en Butarque. Con Borja Garcés, Robert Ibáñez y Juan Muñoz como jugadores más insistentes, en varias ocasiones sacó los colores a la defensa del cuadro almeriense.
Y, en la primera de ellas, Borja Garcés, tras aprovechar una indecisión de Rodrigo Ely y de Alejandro Pozo, se coló por la banda derecha para batir a Fernando en un mano a mano. El 1-0 fue un jarro de agua fría para el Almería, que, sin embargo, reaccionó. Primero, con un remate de Umar Sadiq que salvó Riesgo y, después, con el tanto del empate, obra de Rodrigo Ely.
El Almería ha amortizado un fichaje imprevisible, que llegó al club andaluz para cubrir las bajas por lesión de Chumi, Carriço y Martos. Sin equipo, tras rescindir su contrato en el Nottingham Forest, Ely apareció por la entidad almeriense para marcar goles decisivos.
El que celebró en Leganés, pudo serlo. Siempre incómodo en los saques de esquina, peleó una pelota como un miura para acabar fusilando a Riesgo. Su tanto, tendría que haber aplacado los nervios del Almería, pero no era el día y volvió a jugar con fuego. Se dejó llevar y tras dos oportunidades clarísimas de Eraso, de Borja Garcés y de José Arnaiz, que estrelló una volea en el larguero, apareció Kenneth Omeruo para cabecear a la salida del córner el 2-1 al filo del descanso.
El empate del Valladolid frente al Huesca dejaba al Almería en Primera División tras el acto inicial. Pero todo podía pasar en la segunda parte. Un solo gol, cambiaba todo y éste llegó pronto en Zorrilla con el acierto de Weissmann en los primeros minutos de la reanudación.
El Almería, ahora sí, fruto de la necesidad, paso a dominar la pelota. Necesitaba dos tantos para ascender, porque el triple empate con el Eibar y el Valladolid dejaba fuera al equipo de Rubi. Se hizo dueño y señor del choque y volvió a empatar muy pronto, por medio de Sadiq, su jugador más decisivo este curso. El delantero nigeriano entró como un camión de mercancías hasta el punto de penalti, desde donde batió a Riesgo para dejar a su equipo al borde del ascenso.
Tenía exactamente 37 minutos para marcar y acabar con la tensión. Sólo necesitaba un gol más. Un último empujón que pudieron ser dos si Fernando, en un último momento de flojera del Almería, no hubiese sacado una manopla imposible a un disparo a bocajarro de Jon Bautista.
Hasta el minuto 88 no llegó esa ocasión mágica y épica con la que todo equipo que desea ganar algo sueña. La tuvo Eguaras, que cabeceó una pelota que salvó de manera espectacular Riesgo. Era la última oportunidad y, cuando el Almería parecía condenado a jugar las eliminatorias por el ascenso, apareció Zarfino para provocar un "Alcorconazo" que provocó la fiesta del Almería.
-- Ficha técnica:
2.- Leganés: Riesgo; Palencia, Omeruo, Bruno, Sergio González (Quintilla, m. 60), Javi Hernández; Shibasaki, Eraso (Bautista, m. 60); Robert Ibáñez (Arnaiz, m. 34), Borja Garcés (Barcenas, m. 60) y Juan Muñoz (Rentero, m. 91).
2.- Almería: Fernando; Pozo, Ely (Lazo, m. , Babic, Akieme; De la Hoz, Samuel Costa; Portillo (Arnau, m. 68), Robertone (Eguaras, m. 75) Ramazani (Dyego Sousa, m. 68); Sadiq.
Goles: 1-0, m. 9: Borja Garcés; 1-1, m. 15: Ely; 2-1, m. 42: Omeruo; 2-2, m. 53: Sadiq.
Árbitro: Arcediano Monescillo (Comité Castellano-Manchego). Mostró cartulina amarilla a Babic (m. 25), Sousa (m. 90) por parte del Almería y a Palencia (m. 49), Bruno González (m. 57) y Omeruo (m. 83) por parte del Leganés.
Incidencias: partido correspondiente a la cuadragésimo segunda jornada de LaLiga SmartBank disputado en el Estadio Municipal de Butarque ante 8.654 espectadores.
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