El vino de Jerez no está en precio. A excepción de la gama premium de los VOS y los VORS, que cotizan al alza gracias a los principales prescriptores gastronómicos, el resto se debate en unos números que los hacen insostenibles para las bodegas.
La primera medida pasaría por subir el precio de la uva, que se mantiene en mínimos históricos y pone en peligro la continuidad de los viñistas. En esto coinciden nuestros tres invitados: Ricardo Rebuelta, viñista y vicepresidente del Consejo Regulador; Paz Ivison, periodista gastronómica, y Eduardo Ojeda, adjunto a la dirección general del Grupo Estévez y fundador del equipo Navazos.
La incorporación de vinos de la tierra de Cádiz a la denominación de origen, como los vinos tranquilos de Palomino, se antoja como otra forma de desatascar el crecimiento.
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