El acusado, Gaizka Andoni Astorquizaga, fue condenado en 2011 por haber colocado un artefacto en una sucursal bancaria de Bilbao que no llegó a estallar
Así lo publica el diario The New York Times (NYT), que cita a funcionarios estadounidenses que han tenido acceso a informes de los servicios de inteligencia