Vivir la calle
Procurar estar limpio o mantenerse activo intelectualmente, es una odisea para continuar seguir siendo tan digno como cualquier otra persona
Procurar estar limpio o mantenerse activo intelectualmente, es una odisea para continuar seguir siendo tan digno como cualquier otra persona
Los caminos andados nos llevan, a veces, más allá de lo que hubiésemos querido o nos quedamos cortos sin alcanzar la meta que nos habíamos propuesto
Acallar cualquier tipo de crítica sobre nosotros, mirar para otro lado o no querer ver la realidad, no es algo que a la larga nos vaya a resultar beneficioso.
A veces tardamos demasiado en tomar las decisiones, porque no queremos comprometernos, y otras porque no sabemos nada e ignoramos la realidad
Desde superútil a supermaravilloso pasando por supermemoria, nos resulta superaburrido estos héroes de nuestra expresión
Entre lo previsible y lo imprevisible, la indiferencia se mueve mucho en este segundo aspecto
En ocasiones el tiempo se nos pasa y en otras contamos los segundos como si fuesen horas
Con los años vamos descubriendo los misterios y destinos, y que por mucho ruido que hagamos, no paramos de equivocarnos
Hay que tener en cuenta, cuando pretendemos elaborar una buena historia, a quien la queremos dirigir y que hoy en día nos movemos en un mundo interconectado
Hay quienes tienen la manía de sobresalir a toda costa, y aspiran mas a ser perfectos que felices
Cuando somos el centro de atención de la gente, hemos de tener más cuidado con lo que decimos y hacemos
A veces los bloqueos emocionales manejados por odios y rencores, nos impiden ver con claridad
Los toques mágicos, nos alejan de memeces, gilipolleces, pamplinas y gansadas, potenciando más lo que nos fortalece que lo que nos hace flojear
En ese querer alcanzarlo todo, y con una infoxicación permanente, nos intentan colar lo que ocurre y lo que no