La presidenta de Diputación, Irene García, ha participado en el Consejo de la Mancomunidad de Municipios del Campo de Gibraltar, convocado por su titular, Juan Lozano, para analizar los proyectos de generación de energía contemplados en la comarca. Todos los alcaldes han debatido en torno a dos asuntos que suscitan un evidente interés social en sus respectivos términos municipales: la subestación de transformación eléctrica planteada por Red Eléctrica Española en La Línea y la proliferación de peticiones para instalar plantas fotovoltaicas.
En su intervención, Irene García ha defendido la necesidad de “reclamar a la Junta de Andalucía la adopción de una planificación estratégica que permita determinar las ubicaciones de los proyectos”. Esa reclamación requerirá un trabajo previo, establecido desde el consenso con todos los ayuntamientos, donde se incorporen las posibilidades y las limitaciones de cada término. “No hagamos la casa al revés”, manifestó la presidenta de Diputación ante los alcaldes, refiriéndose a la necesidad de que sean los municipios los que marquen sus pautas de desarrollo económico y social. En la concreción de ese documento de consenso Irene García ofreció la mediación y asistencia técnica de la Diputación de Cádiz.
El lugar planteado para asentar la subestación eléctrica proyectada en La Línea es rechazado por el Ayuntamiento tanto en el ámbito administrativo –con la presentación de alegaciones- como judicial, a través de un recurso presentado ante la Audiencia Nacional. Desde la sociedad se ha constituido una plataforma artífice de movilizaciones muy secundadas. En lo que respecta a las fotovoltaicas en la actualidad se contemplan seis proyectos en la comarca, con incidencia en Jimena, San Roque, San Martín del Tesorillo y Castellar; suman más de 3.100 hectáreas de superficie y más de 1.100 megawatios de potencia.
Esos números se traducen en plantas, subestaciones y líneas de alta tensión para la evacuación que saturan en algunos casos las proyecciones municipales. En esa tesitura se ha concretado la propuesta de Irene García, aceptada por el Consejo Comarcal. A este foro acudieron, también como invitados, los alcaldes de las poblaciones malagueñas de Casares y Gaucín, quienes también mostraron su preocupación sobre el aluvión de nuevos proyectos energéticos.
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