Esta semana se aplica un tratamiento larvicida en el canal de la estación depuradora de aguas residuales (EDAR) de Vejer por parte de personal técnico de la empresa Athisa Medio Ambiente. Esta sociedad es la contratada por el área de Transición Ecológica y Desarrollo Urbano Sostenible de Diputación para controlar las poblaciones de mosquitos en La Janda, concretamente en los municipios de Vejer, Barbate y Benalup-Casas Viejas. Desde abril se lleva a cabo la etapa de vigilancia diseñada para detectar los focos existentes y determinar un diagnóstico. Fruto de esa prospección, que aún se está desarrollando, se ha advertido una elevada densidad de larvas en el canal de la EDAR de Vejer. Esta circunstancia ha motivado que se solicite a la Junta de Andalucía una autorización específica para emprender el oportuno tratamiento.
El plan de vigilancia sigue confirmando la existencia de otros focos en un ámbito de actuación que abarca arrozales, láminas de agua o antiguos depósitos. Además del tratamiento en el canal de la EDAR de Vejer, desde el área de Transición Ecológica y Desarrollo Urbano Sostenible de Diputación se ha solicitado otra autorización específica para intervenir en algunos canales de Barbate en los que también se han detectado altas concentraciones de larvas.
Además, el área que coordina el vicepresidente segundo de la institución provincial, Mario Fernández, ante el probable hallazgo de nuevos enclaves con alta densidad larvaria, ha emitido una solicitud genérica con el ánimo de resolver estas tareas de control con la mayor eficacia posible.
La campaña de control de las poblaciones de mosquitos se desarrollará del 15 de julio al 15 de septiembre. Esta intervención, ya autorizada por la Junta, puede fortalecerse con actuaciones previas sobre los focos larvarios, conforme a la prospección que se realiza en el plan de vigilancia, y que también requieren la autorización autonómica. Los tratamientos, como el que se ha iniciado en Vejer, evitan que las larvas eclosionen en mosquitos adultos. El objetivo es frenar la existencia de plagas durante el verano y sus perjuicios a la población y negocios locales.
Las tareas de vigilancia contratadas por Diputación permiten estimar las densidades de las poblaciones de mosquitos, determinar su taxonomía, su distribución en la comarca de referencia, su proliferación e incluso los porcentajes de mortalidad larvaria una vez aplicados los tratamientos.
Mario Fernández ha valorado la solvencia técnica con la que se está afrontando este proceso, si bien ha insistido en la necesidad de una mayor diligencia en las autorizaciones «para que los tratamientos puedan ser plenamente eficaces».
En las tareas de tratamiento se emplean biocidas autorizados por el Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social que no suponen perturbación alguna para el equilibrio ecológico. El producto se aplica mediante medios terrestres, que llegan a ser manuales si se trata de áreas de protección.
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