El consejero de Salud, Jesús Aguirre, ha avanzado este martes que la Junta calcula tener con "alta inmunidad" al 52,3 % de la población diana a 31 de mayo, según un estudio proyectivo que detalla que 3,4 millones de andaluces habrían recibido ya para esa fecha al menos una de las dos dosis de la vacuna.
Aguirre se ha expresado así durante la rueda de prensa que ha ofrecido al término del Consejo del Gobierno junto al portavoz y consejero de la Presidencia, Elías Bendodo, que ha precisado que a finales de este mes todos los mayores de 70 años habrán recibido las dos dosis de la vacuna.
Según el responsable de Salud, para esa fecha habrá sido vacunado con al menos una dosis el 90 % de los ciudadanos de entre 60 y 69 años y un 75 % de quienes se encuentran entre los 50 y los 59, por lo que 3,4 millones de residentes en la comunidad contarían ya al menos con una dosis.
A esta cifra, que equivale a un 48 % de la población diana mayor de 16 años, habría que sumarle la población inmunizada por haber pasado el virus, es decir, con "infección natural", que son 304.773 personas, de donde sale que la población inmune a fecha 31 de mayo será un 52,3 %, ha detallado Aguirre.
Ha explicado que esta semana se empezará a llamar a las personas de edad comprendida entre los 55 y los 50 años y que se ha comenzado a vacunar a personas sin hogar y a inmigrantes con la vacuna de Janssen, ya que se trata de segmentos de población "difícil de fidelizar para la segunda dosis".
También se seguirá llamando a grupos de trabajadores esenciales que se quedaron "en el limbo" cuando se retiró la vacuna de AstraZeneca, como los visitadores médicos, y se seguirá trabajando con distintas empresas siguiendo el modelo empleado con los estibadores, es decir, a través de las mutuas sumar recursos "públicos y privados".
El consejero de Salud ha sostenido que el crecimiento exponencial de las vacunas "llama al optimismo" pero ha recordado que la incidencia actual de la covid-19 se sitúa en 169,11 casos por 100.000 habitantes en 14 días y "se ha estancado en los últimos tres o cuatro días después de llevar una tendencia clara a la baja".
Ha explicado que está disminuyendo a presión asistencial pero que la incidencia acumulada "baja de forma muy lenta como consecuencia de las celebraciones familiares" y ha recordado que desde que decayó el estado de alarma -y con él el toque de queda- "es muy complicado que no celebres una primera comunión en casa con el número de personas que quieras, porque nada te lo puede impedir".
Aguirre ha recordado que en esta situación "el arma más potente después de la vacuna para luchar contra el virus es la mascarilla" y que, desde el punto de vista epidemiológico, los técnicos advierten de que hasta alcanzar la inmunidad del 70 % de la población se debe seguir utilizando este elemento.
"No es positivo este debate ahora", ha opinado el consejero, que ha dicho percibir que "parece que hemos acabado con el virus, y no es así ni mucho menos" y ha animado a quienes lo crean así a "que vayan a las UCI y vean que se sigue falleciendo y habiendo patologías graves que luego se alargan en el tiempo".
Por ello ha pedido "prudencia" y "mucho cuidado con las celebraciones familiares y las aglomeraciones en la vía pública" y ha instado a "no confiarse con cantos de sirena".
También el portavoz, Elías Bendodo, ha hecho un nuevo llamamiento a la responsabilidad ciudadana porque "cada paso atrás son vidas que nos cuestan y negocios que tienen que echar el cierre".
"Al final de la desescaladas uno se relaja, está más cansado y se pueden producir tropiezos, repuntes, olas, que pueden complicar la situación", ha advertido.
Por otra parte Aguirre ha dado a conocer que el 99,9 % de las residencias de mayores están libres de covid en usuarios y que doce centros contabilizan casos solo en trabajadores, con dos residentes positivos, uno de ellos ingresado, y trece casos confirmados entre los empleados.
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