La Audiencia Provincial de Cádiz ha confirmado que el Ayuntamiento de Cádiz no cometió ningún tipo de delito por colocar en marzo de 2020 en su fachada la bandera LGTBI, ya que esta no es un símbolo "excluyente".
El Ayuntamiento de Cádiz ha informado de que la Audiencia Provincial de Cádiz confirma así el auto del Juzgado de instrucción número 2 que archivó una denuncia interpuesta por la Asociación de Abogados Cristianos contra el alcalde de Cádiz, José María González, Kichi, por colocar en la fachada del Ayuntamiento la bandera LGTBI.
La sentencia de la Audiencia Provincial, según recoge el Ayuntamiento de Cádiz, señala que "no se aprecia la existencia de un resultado injusto, es decir, perjudicial" por la colocación de esta bandera.
"No es una bandera que represente a determinado colectivo excluyente, como sí lo sería la de un partido o de una ideología, sino una tendencia sexual que se da en todos los ámbitos políticos, ideológicos, sociales, raciales, etcétera, con lo cual no existe una vulneración del derecho de nadie, ni una merma de la objetividad política de la institución que enarbola la bandera", añade el tribunal.
La sentencia dice que "de otro modo llegaríamos al absurdo de considerar delictivo, por ejemplo, el colocar en los ayuntamientos otros signos de apoyo a ciertos colectivos, como los lazos amarillos de apoyo a enfermos de cáncer o negros de apoyo a las víctimas del terrorismo".
La concejala de Feminismos y LGTBIQ+ del Ayuntamiento de Cádiz, Lorena Garrón, ha mostrado su satisfacción por la sentencia dictada por la Audiencia Provincial que desestima el recurso de apelación interpuesto por la Asociación de Abogados Cristianos y ha lamentado que haya "colectivos de extrema derecha y conservadores" a los que molesta "una bandera inclusiva que simboliza la diversidad y la libertad de un colectivo históricamente oprimido".
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