Griñán, que participó en el encuentro que mantuvieron unos 150 representantes de empresas, universidades, investigadores e instituciones integradas en CTA, alabó la “fórmula de éxito” de este “instrumento potente” en su apuesta por la innovación mediante la colaboración entre lo público y lo privado, la “intermediación eficaz”, con “resultados tangibles” que construyen un nuevo modelo económico competitivo y sostenible, abierto a nuevos mercados y productos.
Tras destacar que la Junta mantiene el compromiso compartido con CTA en sus inversiones, pidió a las empresas que den “la vuelta de forma tozuda” a las estadísticas, que reflejan que las administraciones han incrementado un 7,2% las inversiones en I+D+i y las universidades un 11,5%, mientras las empresas las han reducido en un 5,9%, por lo que les instó a “tomar la delantera” para acortar ese diferencial.
"No importa tanto el beneficio rápido, como el estar bien situado y con CTA y el proyecto Andalucía Sostenible se sigue en la dirección correcta", afirmó el líder del Ejecutivo andaluz, que aclaró que la Ley de Economía Sostenible "no es sólo un anteproyecto, sino que forma parte de una estrategia global".
En este marco, Corporación Tecnológica, que aprobó un presupuesto de 27 millones para 2010 para financiar proyectos de I+D, se establece como "líder" del procesos de transformación y cambio económico en la Comunidad "hacia perfiles de valor añadido y aunando voluntades", lo que supone una "apuesta ganadora", según recalcó Griñán.
De este modo, insistió en la necesidad de contar con una estructura más sólida y competitiva para salir de la crisis y para que "no se repita" la actual situación, "apostando por la sostenibilidad y el valor añadido, frente a los productos especulativos y que priorizan los beneficios".
Recordó que Andalucía ha captado más del 54 por ciento de los incentivos del Fondo Tecnológico concedidos hasta el día 25 de noviembre, con 130,8 millones de euros, y que ya hay 22 iniciativas andaluzas en marcha, que movilizarán una inversión privada de 244 millones de euros. Además, más de un 20 por ciento de los proyectos aprobados en la única convocatoria de 2009 del Programa Cenit están liderados por empresas con centros operativos en Andalucía, "muy por encima de lo habitual y superior a lo de otras regiones tradicionalmente fuertes en la I+D+I en consorcio.
Trabajo continuado y a largo plazo
Por su parte, el presidente de CTA, Joaquín Moya-Angeler, reconoció la "dificultad" de 2009 en el ámbito empresarial, pese a la que se ha continuado realizando un "importante esfuerzo" que demuestra "la voluntad de Andalucía por avanzar en materia de innovación, "un mundo interesante y complejo que requiere trabajo continuado y a largo plazo".
Moya-Angeler subrayó la necesidad de que la universidad, que se ha "democratizado", dé "un paso más" e intente mejorar su especialización, "lo que requiere generosidad por parte de todos, como los rectores, la Administración o los Consejos Sociales". Asimismo, apuntó también al papel de las empresas en el futuro de la región, dejando claro que el tejido productivo andaluz requiere que las pequeñas y medias empresas den un "salto adelante y entren en el camino de la innovación".
"Andalucía es la región con el plan más coherente e integrado en materia de innovación y que cuenta con numerosos mecanismos para favorecer la transferencia tecnológica", añadió el directivo, quien indicó que cada euro incentivado desde CTA procura un valor añadido de 1,4 euros.
Con anterioridad al encuentro entre Griñán y miembros de CTA, tuvo lugar el Patronato de la entidad, que aprobó un presupuesto de 27 millones para 2010 y el desarrollo de un Plan de Acción, que pretende mantener un ritmo estable de aprobación de unos 100 proyectos de I+D+I anuales y consolidar el número de miembros, actualmente de 134 empresas, el triple que en el momento de su constitución en octubre de 2005.
El acto contó con la presencia del consejero de Innovación, Ciencia y Empresa, que pidió a los miembros de CTA que asuman el "reto" de convertirse en empresas tractoras dentro de sector de actividad, "divulguen la necesidad de innovar y apuesten por la I+D+I entre empresas más pequeñas".
Soler señaló que CTA supone un "modelo a seguir" cuyos resultados confirman su consolidación como un instrumento "eficaz para la generación de una nueva mentalidad empresarial, incluso en momentos de dificultades económicas". Así, recordó que este instrumento pretende potenciar y respaldar la innovación, la interacción con los agentes del conocimiento y la colaboración empresarial, "como principios esenciales sobre los que construir un nuevo modelo económico y productivo más innovador, fuerte y competitivo".
Añadió que esta fundación plantea una "alternativa a la innovación más allá de la tradicional subvención", al poner a disposición de las empresas el sistema público de agentes del conocimiento para el desarrollo de proyectos de investigación, además de potenciar la actividad investigadora en centros públicos con el respaldo financiero de entidades privadas, acercando la labor investigadora y formativa a las necesidades productivas y de profesionales en el mercado.
Balance de CTA
CTA aprobó en 2009 un total de 81 proyectos de I+D+I, lo que supone un 12,5 por ciento más que en 2008 y movilizó una inversión probada de 64,8 millones (+9,6%), con incentivos de 21,1 millones (15,5%).
En este marco, la Corporación acumula 287 proyectos de I+D+I desde 2005, con una inversión privada superior a 256 millones e incentivos de 80 millones. En estas iniciativas participaron alrededor de un millar de investigadores de 229 grupos de investigación de universidades, hospitales y centros de investigación públicos andaluces, con un presupuesto de más de 47,5 millones.
Además, la tasa media de participación de los grupos del Plan Andaluz de I+D+I (Paidi) ha crecido hasta un 22 por ciento, siete puntos por encima del mínimo exigido por CTA y muchos de estos grupos ya han establecido lazos estables de cooperación más allá de los proyectos concretos, mediante cátedras y acuerdos a medio plazo.
Del total de proyectos, el 27 por ciento corresponden al sector de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC), el 25 por ciento al Aeroespacial y de Procesos Productivos, el 25 por ciento al de Energía y Medio Ambiente, el 13 por ciento al Agroalimentario y el once por ciento restante al de Biotecnología.
Para el periodo 2010, CTA prevé potenciar la relación y cooperación de la entidad con todos los agentes del conocimiento andaluces, impulsar la creación e incorporación a la Fundación de empresas de base tecnológica, como 'spin-off' o 'start-up'; además de seguir reforzando la relación universidad-empresa y estimular la puesta en valor de patentes y conocimiento protegido andaluz.
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