El presidente de la Asociación de Hosteleros de Sevilla, Antonio Luque, ha mostrado su satisfacción por la relajación de las restricciones ante la covid-19 y, aunque ha matizado que les gustaría poder dar cenas, entienden que el mes de febrero ha sido "terrorífico" en cuanto a fallecimientos.
En declaraciones a los periodistas el también vicepresidente de Horeca ha explicado que habían pedido a la Junta la apertura de los establecimientos hasta media hora antes del toque de queda, algo que ha sido atendido, aunque "no todo el mundo está satisfecho, porque lo que nos gustaría es estar abiertos para dar cenas", ha dicho.
"Pero hay que entender que venimos de un mes de febrero terrorífico, con 80 fallecimientos al día, y tenemos que ser responsables", ha dicho Luque, quien ha apostado por trabajar "de la mano" con la Junta en las mesas técnicas, en las que ya han pedido que a partir del día 19 se amplíe una hora el toque de queda, y por tanto puedan abrir hasta las 22:30.
Sus planes, ha explicado, pasan por que a final de este mes, con el cambio al horario de verano y el aumento de las temperaturas, "se pueda tener el toque de queda a las doce de la noche y dar las cenas hasta las once y media, sobre todo al aire libre, evitando así desmadres en fiestas privadas y botellones, donde se da el mayor porcentaje de contagios".
Luque ha vuelto a reclamar ayudas directas "sobre todo al Gobierno de España, que después de un año es el único de la Unión Europea que no ha dado nada" y ha pedido que el anuncio de 11.000 millones "sea una realidad rápida", igual que las anunciadas por la Junta para las pymes a partir de enero.
Ha precisado que han trasladado al Gobierno andaluz un plan "para que no sea café para todos", sino que vayan a los sectores más perjudicados, como el ocio nocturno, los cátering o los feriantes, de forma que las ayudas "sean proporcionales para los que han tenido más pérdidas".
Luque ha precisado que se mantiene la manifestación convocada para el día 16 para reclamar esas ayudas directas al Gobierno central.
"No tenemos gasolina, nos quedan muchos meses por delante para que llegue la normalidad y no nos pueden dejar en la cuneta porque producimos muchos empleos directos y mucha economía", ha zanjado.
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