Es sabido por todos, y por desgracia, que no es un buen momento para los emprendedores y para todo aquel que tenga un negocio. Pero para Ainhoa Rosado, periodista y experta en Marketing digital, ahora que lamentablemente los negocios considerados ‘no esenciales’ han tenido que echar el cerrojazo, en principio, hasta el 9 de febrero, es “el momento idóneo para reiventarse y analizar tu negocio”.
Ainhoa lleva años dedicándose al marketing digital y a asesorar a marcas y comercios que necesitan esa digitalización, para esta jerezana que también es emprendedora, lo más vital es “saber en qué punto se encuentra el negocio y saber que lo que valía antes no servirá ahora. Es el momento de asimilarlo y dejar la frustración o lamentación a un lado. No podemos luchar, pero debemos contraatacar en la medida de lo posible”.
En medio de esta vorágine hay que apostar, hacer un all-in a la venta online. Y la línea a seguir según los expertos es coger las riendas de las redes sociales, empezando por Intagram. “Es una red sencilla, muy intuitiva que solemos usar de manera personal, pero hay que dejar a un lado la idea de ser un lugar donde compartir fotos y hacer amigos para utilizarlo como herramienta de marketing, teniendo una estrategia lógica, claro”, confirma Ainhoa Rosado, en cuyas redes aconseja a diario a través de tips y su método InstaGlam para llegar a ese nicho de clientes potenciales.
Pero como todo, hay herramientas de pago y otras que son gratuitas o más adsequibles. “Antes de invertir en publicidad en IG sin saber cómo funciona o crear una web sin saber atraer tráfico, comenzaría creando embudos de venta y contenido de valor. No hay que tener las redes sociales como un simple catálogo con fotos y fin, hay que perder el miedo a la cámara y hacer directos, reels, subir historias e incentivar a que interactuen con tu cuenta, como si fuera una revista de entretenimiento. Si sólo pongo mi producto un texto y ya está , no conseguirás comentarios, ni likes, ni los usuarios se acordarán de tu cuenta. El algoritmo de IG entonces entiende por mi comportamiento que no me interesa y no me va a volver a mostrar el perfil. Apostaría por los directos compartidos que ahora están en pleno auge, y a través de ellos también te muestras a otro público diferente que puede llegar a ser cliente o con los reels que puedes etiquetar productos. Hay que vender sin vender. ”, asegura Rosado, quien afirma que si no sales de la zona de confort y sigues en la monotonía con las publicaciones, no conseguirás resultados diferentes.
En el caso de la hostelería, Ainhoa recomienda tener un espacio muy instagrameable, “un rincón reconocible en el que todo el mundo quiera hacerse una foto allí, un sofá, un fondo, una pared. Al final se haría viral y habría personas que irían expresamente para hacerse la foto”
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