El pleno del Ayuntamiento hispalense, reunido este jueves en sesión ordinaria, ha formalizado una declaración institucional de apoyo a la recuperación del antiguo puente basculante de Alfonso XIII, construido con motivo de la exposición iberoamericana de 1929, propiedad del Puerto de Sevilla e instalado en una parcela colindante a la avenida de la Raza; "como pasarela para uso peatonal y de transporte personal alternativo en un lugar emblemático" de la ciudad.
En concreto, la declaración institucional apoya la idea de "acordar con la Autoridad Portuaria y las administraciones competentes y mediante la colaboración, si fuera posible, con el sector privado, su recuperación y reconstrucción sobre el río Guadalquivir, como pasarela para uso peatonal y de transporte personal alternativo en un lugar emblemático de la ciudad, de acuerdo con el dictamen de los técnicos sobre la ubicación y los costes y con el consenso de las asociaciones y entidades ciudadanas" que desde hace años reclaman el rescate de esta infraestructura.
Además, la declaración institucional implica promover el reconocimiento de este antiguo puente metálico como bien de interés cultural (BIC) y su inscripción en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz, así como que cuente con un nivel de protección global a través del propio Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de la ciudad.
"TESTIMONIO" DE LA EXPOSICIÓN DEL 29
Todo ello, para rescatar el "elemento arquitectónico singular" que supone el antiguo puente metálico de Alfonso XIII, cerrado al tráfico rodado y humano en 1992 al ser sustituido por el actual puente de las Delicias, "testimonio" además "del gran evento histórico" que constituyó para Sevilla la exposición iberoamericana de 1929.
Ya en 1998, el citado puente fue desmantelado y tras pasar unos cinco años en el muelle de las Delicias, en 2003 fue depositado en un espacio vallado ubicado en la avenida de la Raza y perteneciente a la Autoridad Portuaria, que ostenta la titularidad de esta infraestructura metálica que otrora formaba parte del paisaje fluvial de Sevilla.
SIN PROTECCIÓN PROPIA
Si bien el puente no goza de protección específica, sí contaría con una catalogación a través del Plan General de Ordenación Urbana de Sevilla, dada su ubicación en el sector Puerto del Conjunto Histórico Artístico de la ciudad.
En ese sentido, la Oficina del Defensor del Pueblo Andaluz cerraba recientemente una actuación de oficio, recogida por Europa Press, --tras una anterior respecto a los expolios perpetrados en el puente--, recordando a la Autoridad Portuaria, la Delegación Territorial de la Consejería de Cultura y el Ayuntamiento hispalense "la imperiosa necesidad de definir el destino y uso final de dicha estructura", pues tales administraciones "vuelven a remitirse a futuras e imprevisibles decisiones que pueden de nuevo prolongarse en el tiempo".
Al respecto, la Autoridad Portuaria prevé licitar un contrato de 100.000 euros para labores de conservación en el citado puente, merced a los criterios que estipule el Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico (IAPH), mientras la empresa Eddea, Arquitectura y Urbanismo, a la que la Autoridad Portuaria ha encargado el diseño de la integración de la avenida de La Raza y el muelle de Tablada en el entorno urbano, habrá de proponer una "solución" para la estructura.
El año pasado, por cierto, la historiadora del arte y escenógrafa Pau Ferrer abogaba por "retomar" la idea de volver a instalar el puente sobre el brazo urbano del Guadalquivir, como pasarela entre la zona de Los Remedios correspondiente a la antigua fábrica de Altadis y el Paseo de las Delicias, extremo que promueven actualmente los colectivos conservacionistas. Las asociaciones ciudadanas que reclaman la restitución del puente apoyan de hecho esta propuesta concreta.
Envía tu noticia a: participa@andaluciainformacion.es