La llegada de la primavera es sinónimo de días más largos, más soleados y un tiempo más agradable. También es época de más lluvias, al menos en buena parte de la España mediterránea, pues este clima concentra buena parte de las precipitaciones en esta estación.
Muchos insectos y roedores que permanecen más latentes en otoño e invierno, comienzan a reproducirse en masa cuando las temperaturas se elevan y empiezan a inundar lugares abiertos y cálidos para habitar. Esto incluye también a los espacios urbanos y las viviendas, no solo las áreas verdes.
De este modo, las plagas en primavera pueden perjudicar de manera importante jardines y parques, pero también causar daños materiales al mobiliario y a la salud de las personas. Insectos como garrapatas, hormigas, mosquitos, polillas, orugas, cucarachas y pulgas son muy comunes, así como especies de roedores, en especial las ratas y ratones. Los gusanos tampoco faltan a esta fiesta.
Un buen control de plagas implica saber qué animales son beneficiosos para el jardín o la vivienda, pero no cabe duda de que una buena gestión será aquella en la que se contacte con expertos para solucionar estos problemas.
Qué podemos hacer cuando aparecen plagas
Pineda Servicios Integrados en una empresa de control de plagas con amplia trayectoria y experiencia en su sector. Trabaja en toda España y ofrece tratamientos efectivos para combatir este problema y devolver salud al jardín y la vivienda.
La presencia de plagas tiene como único objetivo a cumplir su eliminación, pues de lo contrario se pone en riesgo la salud estructural de la vivienda e incluso la salud física de quienes la habitan. Las termitas, por ejemplo, causan daños muy importantes, y como ellas, otras plagas pueden convertirse en realmente peligrosas.
Las empresas de control de plagas actúan de manera eficiente cuando el problema ya es grave y además ofrecen consejos útiles para evitar esta proliferación, como veremos a continuación.
Las plagas más comunes en primavera
Los mosquitos, las cucarachas y las pulgas viven su fase de apogeo cuando las temperaturas comienzan a ser más agradables, es decir, cuando nos acercamos a los meses centrales del año. En el caso de los mosquitos, su presencia se explica porque pasan de la fase larvaria a la madurez y comienzan a alimentarse de hemoglobina, una proteína que se encuentra en la sangre y transporta oxígeno, o bien buscan el néctar de las plantas que florecen.
Las cucarachas aparecen especialmente en lugares donde reina la suciedad y la falta de limpieza. Su presencia se asocia también a padecer enfermedades respiratorias como asma o las alergias. Sienten atracción por espacios con comida y agua. Suelen buscar refugio en las tuberías. En muchas localidades se inician campañas masivas de desinfección cuando llegan los meses más cálidos de la primavera, con el fin de mantener a raya este insecto.
Las pulgas, por su parte, son especialmente peligrosas porque transmiten bacterias que afectan a la salud y pican a animales y personas. En los hogares donde conviven mascotas es fundamental revisar constantemente su pelo para mantener alejados a estos insectos. Como ocurre con los mosquitos, su hábitat preferencial son los lugares cálidos y las temperaturas agradables.
Cómo evitar las plagas en casa
Sea cual sea la plaga que afecte a la vivienda, el mejor modo de evitarla es tener buenos hábitos de limpieza y orden. De este modo no quedan migas ni restos de alimentos que atraen a insectos y roedores ni se acumula humedad.
Con respecto a los alimentos, es fundamental almacenarlos en recipientes herméticos de plástico o vidrio, nunca de cartón, pues los pueden roer. La comida de las mascotas también se debe almacenar así.
Otro consejo clave es revisar todos aquellos espacios por donde pueden colarse estos visitantes inesperados, los rincones más inaccesibles, fugas en las tuberías, grietas en las paredes… estos lugares son el hábitat perfecto para las plagas, pues en ellos reina la suciedad y la humedad y tienen libertad de movimiento.
Para las termitas, que son insectos xilófagos que se alimentan de madera, hay que evitar tener madera en la vivienda, especialmente leña, pues esto puede atraerlas. La madera apilada es una invitación para este huésped tan desagradable.
Y finalmente, hay que tener buenos hábitos de alimentación, limitar los espacios donde comemos y ordenar la cocina, el salón o esas estancias tras cada comida, para dejarlo todo ordenado.
Envía tu noticia a: participa@andaluciainformacion.es