Un jurado popular tiene previsto juzgar desde el lunes a un hombre acusado por supuestamente acabar en 2018 en la localidad de Algarrobo (Málaga) con la vida de un vecino con el que tenía malas relaciones a causa del arreglo de un TDT. La Fiscalía solicita una condena de 18 años de cárcel.
Según las conclusiones iniciales del ministerio público, a las que ha tenido acceso Europa Press, en septiembre de 2017, "a causa de esa enemistad" previa por el arreglo del aparato, el procesado y la víctima tuvieron un enfrentamiento por motivos económicos cuando esta última estaba con su pareja en un bar de dicha localidad.
Posteriormente, señala el escrito provisional de esta acusación, el acusado fue a la casa del hombre, donde los dos discutieron y donde, además, tuvo un forcejeo con la novia del otro, que dio lugar a una sentencia condenatoria para ambos por un delito leve de lesiones.
Un año después de ese enfrentamiento, en septiembre de 2018, el acusado, "con plena intención de acabar con la vida" del vecino, dice el fiscal, realizó una vigilancia previa "para la planificación de los hechos y poder asegurar su cometido, así como anular y reducir la posibilidad de defensa y de huida de la víctima".
Con esta idea, el acusado fue de madrugada a la zona del polideportivo y la carpa en la que se celebraban actos festivos por 'La quema de Algarrobo', donde la víctima hacía labores de vigilante. Así, discutieron y "lo zarandeó y arrojó al suelo", relata el escrito de acusación pública.
Entonces, según el miniterio fiscal, "cuando lo tuvo a su merced en esa posición de inferioridad", el procesado supuestamente "le pateó con una violencia extrema totalmente desproporcionada" y le dejó "sin posibilidad de incorporarse o defenderse", llegando a "golpearle de forma reiterada y con gran brutalidad" y a "saltar varias veces sobre la cabeza".
El hombre sufrió 17 heridas que le provocaron la muerte por politraumatismos por agresión. Para la Fiscalía, inicialmente se trataría de un delito de asesinato, por el que solicita que se imponga al acusado una pena de 18 años de cárcel y que indemnice a los hermanos del fallecido con 90.000 euros por los daños morales.
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