Provincia de Granada

Acusado de asesinar a su yerno dice que este se clavó cuchillo en un forcejeo

Lo enjuicia esta semana en la Audiencia de Granada que la víctima se clavó un cuchillo que él portaba tras abalanzarse durante un forcejeo

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  • Juzgados de Granada -

El hombre de 61 años acusado de asesinar de una puñalada en el pecho a su yerno, en agosto del año pasado en Deifontes (Granada), ha dicho este lunes ante el jurado popular que lo enjuicia esta semana en la Audiencia de Granada que la víctima se clavó un cuchillo que él portaba tras abalanzarse durante un forcejeo.

"No sé lo que hizo. Cuando me di cuenta se había clavado él solo el cuchillo (...) Después de lo que había pasado me quedé pillado", ha declarado Antonio E.R., que se enfrenta a una petición fiscal de veinte años de prisión, la misma pena que solicitan las acusaciones particulares que ejercen la esposa y la madre del fallecido.

Durante la primera sesión del juicio, que ha arrancado en la Sección Primera tras la conformación del jurado popular, el procesado ha relatado que el día de los hechos, el pasado 19 de agosto sobre 2019 sobre las 14.00 horas, recibió una llamada telefónica de su yerno en la que este último lo insultó.

En ese momento, el acusado se encontraba al parecer cortando jamón y se desplazó, sin dejar el cuchillo, hasta el domicilio de su yerno, que vivía a unos cien metros.

"Iba a hablar con él, a preguntarle por qué me tenía que faltar de esa manera, sin haberle hecho yo nada", ha comentado Antonio, que ha explicado que la víctima le propinó varios puñetazos y lo agarró del cuello, momento en que sacó el cuchillo con el que antes había estado cortando jamón y que llevaba metido detrás del pantalón.

"Se abalanzó y se clavó el cuchillo. No me di cuenta", ha insistido el acusado, quien momentos después se ausentó del lugar porque "se quedó pillado después de lo que había pasado", y que ha admitido que no tenía buena relación con su yerno porque siempre le estaba "faltando" el respeto.

Tanto la Fiscalía como las acusaciones particulares que ejercen la mujer y la madre del fallecido piden para el procesado veinte años de prisión por asesinato, mientras que su defensa solicita la libre absolución al considerar que no tuvo intención de causarle la muerte y que fue la víctima la que se abalanzó sobre el cuchillo.

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