Cuando la palabra clave de la vuelta al curso no es ilusión o reencuentro, sino absentismo algo no va bien. Y miedo, y descontento e indignación, que de todo ello ha habido en Málaga en el primer día del curso escolar para los 150.000 alumnos y alumnas de segundo ciclo de educación infantil, primaria y educación especial (que son 3.200 menos que el curso pasado en estos niveles educativos) que desde ayer deben acudir a clase. O no. Porque sobre la mesa sigue la oposición de miles de familias, de colectivos como AMPAs en pie de Guerra o las Mareas Verdes, que no tiene claro que el regreso en tiempos de pandemia y con las medidas adoptadas desde el ejecutivo andaluz, se haga con todas la garantías.
Pero, lo que no es una especulación es que tres centros escolares de la provincia, han retrasado el inicio de curso por positivos de docentes, los de Los Claveles de Mijas, y los de Sayalonga y en Santa Ana de Alhaurín de la Torre.No han abierto debido a positivos en COVID en la plantilla del profesorado.
Como tampoco lo es que dos empresas de cátering -Col Servicol y Perea Rojas- hayan comunicado su quiebra hace solo 48 horas dejando afectados a 49 centros escolares, según han señalado desde la Consejería de Educación, precisando que se “está trabajando para dar solución a la mayor brevedad”.
En Málaga hay 469 centros educativos de estas enseñanzas que han abierto sus puertas por primera vez desde mediados de marzo, tras el cese de la actividad lectiva presencial motivado por la pandemia provocada por el virus COVID-19.
Pese a la significativa reducción de alumnado, prestarán servicio en los centros docentes de la provincia que imparten estos niveles algo más de 11.000 maestros, que suponen unos 600 más que el curso pasado.
Además, la delegada de Educación y Deporte, Mercedes García Paine, se ha contratado en la provincia a través de Sipri un refuerzo extraordinario COVID de 378 maestros, que sumados a otras vacantes y sustituciones suman en una primera convocatoria un total de 479 maestros.
Pero no todos lo ven igual, desde AMPAs en pie de guerra han apelado a seguir con las movilizaciones porque consideran que no se cumplen todas las garantías y que la formación debería ser telemática, porque se está poniendo en riesgo a los niños y niñas y también a sus familias. Quedan pues capítulos por escribir.
El retorno escolar más limpio
Mensualmente tendrán los centros 550.000 mascarillas y 75.000 litros de gel hidroalcohólico. Se refuerza el personal de limpieza en centros de la Consejería, como institutos y conservatorios, con alrededor de 300 profesionales.
Inversiones en seguridad sanitaria
160 centros educativos de la provincia cuya conservación y mantenimiento corresponde a la Junta realizando 193 actuaciones de mejora en sus instalaciones para que las clases se puedan desarrollar en entornos seguros con un importe total de 4,3 millones.
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