La Guardia Civil ha detenido a un joven de 25 años con antecedentes policiales en Pinos Puente, en el área metropolitana de Granada, tras intentar saltarse un control cuando conducía a gran velocidad y ser denunciado en 13 ocasiones por incumplir el confinamiento obligatorio decretado en el marco del estado de alarma para frenar la pandemia de coronavirus.
En concreto, según ha informado la Guardia Civil en una nota de prensa, se lo investiga por la presunta comisión de un delito de desobediencia grave a agente de la autoridad. Diez veces fue denunciado por la Benemérita y tres por la Policía Local de Pinos Puente.
Agentes de Seguridad Ciudadana de la Compañía de Armilla, también en el cinturón metropolitano, fueron los que sorprendieron a este individuo durante la madrugada del pasado 28 de abril circulando con su coche a gran velocidad por las calles de Pinos Puente.
Los agentes le dieron el alto, pero "hizo caso omiso" y supuestamente maniobró de manera "brusca, aceleró e intentó huir por otra calle". Las patrullas que en ese momento estaban de control en esa localidad se desplegaron y consiguieron interceptar el vehículo huido y detener a su conductor.
Su manera de proceder ya era un motivo suficiente para que la Guardia Civil lo investigara por un delito de desobediencia grave, han indicado desde el Instituto Armado. Igualmente, pudieron comprobar sus antecedentes y que en el último mes había sido denunciado 13 veces por incumplir el confinamiento.
SORPRENDIDO CON DROGA EN LA ZUBIA
Por otra parte, la Guardia Civil de La Zubia ha detenido a otro individuo, un vecino de este municipio del área metropolitana de Granada de 35 años y con antecedentes policiales, por desobediencia grave a agente de la autoridad por incumplir el real decreto que activó el estado de alarma.
A este hombre, como ocurriera con el detenido de Pinos Puente, la Guardia Civil también intentó identificarlo en un control el pasado 27 de abril por la tarde. Sin embargo, "se dio a la fuga de manera temeraria; casi atropella a un agente y puso en peligro la vida de las personas con las que se cruzó hasta que los agentes consiguieron detenerlo".
Durante la huida los agentes que lo perseguían vieron cómo arrojaba una bolsa amarilla a un contenedor. Al recuperar la bolsa, la Guardia Civil comprobó que contenía 50 gramos de marihuana.
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