La EMT ha comenzado la instalación de mamparas en el puesto de conductor para establecer una barrera física entre este y los viajeros en el acceso al autobús, dentro de las medidas del Gobierno para la progresiva adaptación de los servicios de transporte público a la nueva realidad.
Las mamparas permiten un acceso seguro por la puerta delantera, lo que además supone un mejor aprovechamiento físico del vehículo, liberando para su uso las tres primeras filas de asientos situadas detrás del conductor, que se habían dejado sin uso como medida de seguridad.
En la actualidad ya se han instalado 90 mamparas en los autobuses y se espera que en las próximas semanas el cien por cien de la flota cuente con esta medida de seguridad, según ha informado el Ayuntamiento de Málaga en un comunicado.
Además, a partir del lunes 4 de mayo la ciudadanía contará con una mayor cantidad de autobuses en servicio. El número variará entre 15 y 20 diarios, en turnos de mañana y tarde. Este aumento progresivo del servicio se adaptará a las necesidades de los malagueños en sus desplazamientos, conforme se vayan produciendo las distintas fases de la desescalada previstas por el Gobierno.
LA EMT ya puso en marcha medidas como la eliminación del pago en efectivo con objeto de limitar la posibilidad de contacto directo, admitiéndose únicamente el acceso con la tarjeta bus; el acceso desde la puerta central del autobús y la validación en la máquina situada detrás del conductor; la eliminación del uso de las tres filas de asientos con respecto al conductor; y aviso continuado para que se respete la distancia de seguridad con el resto del pasaje.
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