Jardines como los del Generalife, en España, o los del Palacio de Versalles, en Francia, conforman algunos de los espacios naturales más hermosos repartidos por el mundo que, gracias a la tecnología, se pueden disfrutar desde casa durante la cuarentena.
El confinamiento de millones de personas en sus hogares ha provocado una "desconexión total" con el medio natural, una situación que "puede tener efectos negativos en nuestro bienestar, sobre todo en el estado de ánimo", indica el estudio de paisajismo Fernando Pozuelo Landcaping Collection.
Se trata de un fenómeno conocido como Trastorno por Déficit de Naturaleza (TDN) que puede desembocar en "falta de concentración, ansiedad, estrés o irritabilidad".
En estos momentos de reclusión, debido a la crisis sanitaria causada por el COVID-19, la tecnología permite "acercarnos de forma virtual" para contemplar los parques y jardines "más populares del mundo".
Por ello, este estudio de paisajismo ha recopilado los diez jardines "más bellos que podemos visitar en primera persona sin movernos de casa".
Los Jardines del Generalife, situados a los pies de La Alhambra, se pueden recorrer virtualmente y deleitarse a través de sus patios, sus palacios y su arquitectura, que en su conjunto conforman una "fantástica vía de escape a la altura de los verdaderos reyes nazaríes".
Los Jardín de las Pozas de Xilitla (México), ubicados en medio de la selva, se crearon durante los años 60 y cuentan con un total de 36 estructuras que se intercalan entre pozas de agua o cascadas, así como entre un "sinfín de naturaleza".
Los Jardines Claude Monet, a 75 kilómetros de París, sirvieron al pintor de inspiración para algunas de sus obras, como el estanque de nenúfares, que constituye el eje principal de un recorrido rodeado de una gran variedad de árboles, arbustos y flores.
Los Jardines de Butchard, ubicados en la isla de Vancouver (Canadá), es un entorno natural declarado como Sitio Histórico Nacional gracias a la "magia que caracteriza su trazado, especies y composición".
El Jardín botánico tropical de Nong Nooch, en Tailandia, que cuenta con más de 15.000 especies diferentes, constituye un "gran destino turístico" que permite visitar cuatro zonas bien diferencias según sus especies, así como "diversos espectáculos en sus instalaciones".
Los Jardines del Palacio de Versalles, a escasos 19 kilómetros de París, fueron creados por el rey Luis XIV y conforman el "mejor ejemplo de jardín al estilo francés". Su belleza permitió su declaración como Patrimonio de la Humanidad en 1979 por la Unesco.
Los Jardines de Keukenhof, a pocos kilómetros de Amsterdam, en Holanda, se caracterizan por su gran extensión y una amplia selección de flores, acompañadas de molinos y fuentes. Sobresale su gran colección de tulipanes, la flor que identifica al país y que justamente en abril inicia toda una explosión de formas y colores.
Los Jardines de la Villa d'Este (Italia) se alzan como un lugar de estilo renacentista que se diferencia por el predominio del agua en todo su recorrido. Fuentes y cascadas conforman algunos de los juegos de agua que crean una "gran atmósfera".
Los Jardines de Suzhou son un conjunto de jardines presentes en esta ciudad china, fiel reflejo de su cultura, donde se puede encontrar "una perfecta armonía entre cuatro elementos: agua, rocas, pabellones y plantas". También han sido declarados Patrimonio de la Humanidad por la Unesco desde 1997.
También en China, más concretamente en Shanghái, los Jardines de Yuyuan, finalizados en 1577, se han convertido en unos de los jardines "más espectaculares del mundo". Restaurados en 1982, están considerados monumento nacional por sus destacados estanques que acompañan a los característicos pabellones chinos.
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