El barco "Alan Kurdi" de la ONG alemana Sea Eye rescató en dos operaciones a 84 migrantes, mientras que el "Ocean Viking" de Médicos Sin Fronteras (MSF) y de SOS Mediterranée salvó a 60 personas, entre ellas mujeres y niños.
MSF informó en Twitter del rescate durante la madrugada de las 60 personas que se encontraban hacinadas en un bote de madera a unas 60 millas de la costa de Libia, entre ellas un niño de tres meses y su hermano de tres años.
Por otra parte, el barco "Alan Kurdi" de la ONG alemana Sea Eye rescató anoche en dos operaciones a 84 migrantes, entre ellos una mujer y un niño que se encuentran en condiciones de salud preocupantes, según publicó la organización.
La ONG alemana informó en Twitter de un primer rescate de 44 personas, entre ellas 21 mujeres y tres niños, que estaban en un barco a la deriva.
Posteriormente, tras recibir un nueva alerta, rescataron a otras 40 personas, entre ellas tres mujeres y tres bebés.
Una de las mujeres estaba inconsciente, aunque poco a poco ha ido mejorando, mientras que un bebé de ocho semanas "se encuentra en estado muy débil", por lo que la ONG ha pedido a Malta la evacuación urgente de estas personas.
Continúan así los rescates en el Mediterráneo Central después de que esta semana el atunero español Aita Mari, reconvertido en buque de salvamento, rescató a 78 migrantes y pudo desembarcar en Pozzalo (Sicilia) cinco días después.
También desembarcó este martes en Taranto (Regio Calabria) el barco de la ONG española Open Arms con las 62 personas rescatadas en el mar.
Según la Organización Internacional de las Migraciones (OIM), en lo que va de año y hasta el 13 de noviembre 91.568 migrantes y refugiados han llegado a Europa por el Mediterráneo y 1.091 han muerto en el intento.
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