Tesla, fabricante de vehículos eléctricos de alta gama, ha anunciado que instalará su primera factoría europea en las cercanías de Berlín, con previsión de que pueda empezar a funcionar ya en 2021.
Será la cuarta gigafactoría de esta compañía tras las de Shanghai, California y Nevada.
De este modo se desvanece el sueño de Jerez, en cuyo Pleno municipal llegó a leerse en enero de 2017 una declaración institucional a favor de la instalación de Tesla Motors en la ciudad.
En esa declaración institucional se planteaba el inicio de “contactos” con “otras administraciones, con el sector empresarial, Universidad y agentes sociales con el objeto de conseguir su apoyo para la elaboración de un proyecto serio, atractivo, fiable y con garantías con el que pujar” para que ese proyecto se desarrollase en Jerez.
En el documento, firmado por todos los grupos políticos, se destacaba la ubicación del municipio, “en un enclave óptimo de la provincia de Cádiz por su emplazamiento estratégico, accesibilidad y excelentes conexiones con el resto de Andalucía, España y Europa”, así como su disponibilidad de suelo industrial.
A ello se suma que la ciudad “es conocida a nivel mundial por su circuito de velocidad”, un activo al que se añadía incluso el “futuro Centro Tecnológico del Motor” o el “valor añadido” que supone ser uno de los lugares “con mayor número de horas de sol a nivel europeo”.
La propuesta que se elevó al Pleno municipal había partido de Ciudadanos y fue secundada por todos los grupos políticos entonces presentes en la Corporación.
Apenas una semana después de aquella declaración institucional, Tesla Motors acusó recibo del escrito remitido desde el Ayuntamiento, en un gesto que fue bien recibido por la propia alcaldesa, Mamen Sánchez.
La respuesta procedía de la Gerencia Inmobiliaria de Desarrollo Comercial de la empresa, que agradecía el interés mostrado y lo tenía incluso “en alta consideración”. De hecho, la empresa mostraba voluntad en mantener algún tipo de encuentro.
Finalmente, la multinacional ha hecho público su decisión de desarrollar su proyecto en Alemania y más concretamente en el entorno de su capital, Berlín, después de que hubiera barajado incluso la posibilidad de establecerse en Reino Unido, algo que parece se descartó como consecuencia del Brexit. Jerez hizo su ofrecimiento, pero la historia no pasó nunca de ahí.
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