El concejal de Gobernación del Ayuntamiento de Sevilla, Juan Carlos Cabrera (PSOE), ha advertido este miércoles de que el sector local del taxi no debe caer en "una guerra interna sobre quién tiene el grado de representatividad para formar parte del consejo de gobierno" del Instituto Municipal del Taxi, manifestando que la representación en dicho organismo derivará del "sistema marcado por ley según el número" de afiliados de cada asociación y la labor de "cotejo" del secretario general de la institución.
En declaraciones a los medios de comunicación, Juan Carlos Cabrera ha analizado las últimas movilizaciones promovidas por las asociaciones locales del sector del Taxi.
En ese sentido, este pasado martes se celebraba la primera de las dos caravanas de coches convocadas por la asociación Élite Taxi Sevilla, en demanda de que la renovación de los órganos del Instituto Municipal del Taxi incluya una "ampliación" de la representatividad que abarque a todas las asociaciones del sector, --hasta ahora representado sólo por Unión Sevillana del Taxi y Solidaridad Hispalense--, y que los propios titulares de licencia voten directamente a los representantes del gremio en dicho organismo, estén afiliados o no a alguna de las asociaciones.
En torno a tales reivindicaciones se alinean también la asociación Foro Taxi Libre y la Asociación Taxi Sevilla (ATS), en demanda de que sea acometida una modificación de estatutos del Instituto del Taxi que permita la representación de todas las asociaciones locales del sector y que los representantes del gremio en dicho órgano sean votados por los propios profesionales.
OTRA PROTESTA
Ya para este miércoles, las asociaciones Unión Sevillana del Taxi y Solidaridad Hispalense del Taxi habían convocado por su parte una concentración de taxistas "sin vehículos" ante la sede del Instituto Municipal del Taxi. En la convocatoria de dicha protesta, recogida por Europa Press, estas dos asociaciones apostaban por una concentración "sin vehículos" para "no causar perjuicios a los usuarios del taxi y no dejar desabastecida a la ciudad, (...), evitando molestias con caracoladas absurdas que sólo encuentran el reproche de la opinión pública".
La concentración convocada por Unión Sevillana del Taxi y Solidaridad Hispalense estaba destinada a protestar por "la inoperancia, el colapso administrativo y la lentitud en los trámites por la falta de personal del Instituto del Taxi", así como a demandar la continuidad del convenio firmado en 2016 con el Ayuntamiento para el rescate de 140 licencias de taxi entre 2016 y 2019 a un precio de 70.127 euros en favor de los taxistas interesados en la devolución de sus licencias; "el cierre de las contrataciones" salvo para los taxis adaptados a personas de movilidad reducida para no "volver al pasado y repartir miseria para todos" y reclamar "más control y vigilancia ante la competencia desleal y el intrusismo".
Este último extremo, claro está, alude a los conductores de vehículos de transporte concertado (VTC) que trabajan para las empresas de alquiler de coches con chófer como Uber y Cabify.
"LA UNIÓN HACE LA FUERZA"
A tal efecto, Juan Carlos Cabrera ha invocado la máxima de que "la unión hace la fuerza", recordando que el sector del taxi afronta "problemas importantes como la implantación de los VTC" y no procede "una guerra interna sobre quién tiene el grado de representatividad para formar parte del consejo de gobierno del Instituto del Taxi". Tal extremo, según ha precisado, derivará del "sistema que marca la propia ley por el número de asociados" de cada entidad y el posterior "cotejo" del secretario del Instituto del Taxi.
Por eso, aunque ha abogado por que el consejo de gobierno del Instituto del Taxi goce del "mayor grado de representación" por parte de los taxistas, el concejal Juan Carlos Cabrera ha pedido que ello sea fruto de "un acuerdo" al respecto entre las propias asociaciones del sector.
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