Decir no a las bolsas de supermercado, evitar el consumo de toallitas y una infinita lista de productos elaborados con plásticos es clave para revertir la situación a la que están abocados los océanos del planeta, un propósito reflejado de forma simbólica en un desfile con diez vestidos inspirados en el fondo del mar.
Estampados de algas y peces, sombreros con forma de concha, tocados de plumas y hasta unas gafas de bucear sirven como ejemplo de la diversidad y las posibilidades que ofrece el medio marino si se explota de manera sostenible y se revierten los niveles de contaminación desbocados que amenazan su flora y su fauna.
El Aula del Mar de la capital malagueña ha acogido este lunes, cuando se celebra el Día Mundial de los Oceános, un desfile con estos vestidos que se enmarcan en un proyecto impulsado por el Fashion Art Institute en el que se combina arte y costura.
El rico cromatismo que esconde el mar queda plasmado en los trajes, diseñados por Manuel Fernández e intervenidos por artistas plásticos de España, Colombia, Ecuador y Chile.
Además, cuatro de ellos han sido elaborados con material reciclado y pintados bajo el mar por el artista submarino Alfonso Cruz, que ha utilizado posidonia como protagonista del discurso creativo de los diseños.
La disminución de la población de posidonia "es un problema grave en casi todo el Mediterráneo", ha subrayado en un acto previo al desfile el diseñador y presidente del Fashion Art Institute, Manuel Fernández, que ha insistido en el papel clave de esta planta acuática para mantener la claridad y la limpieza de las aguas.
La colección de trajes se enmarca dentro de la línea de trabajo de Fernández, que ha explicado que actualmente sus creaciones ponen el foco en los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible impulsados por la Organización de Naciones Unidas (ONU).
"Hago trajes blancos, me inspiro en la obra de los artistas plásticos, ellos los intervienen y se crea una obra de arte cuyo soporte es un desfile", ha dicho.
La actriz y embajadora del proyecto, Loles León, ha puesto el foco en la necesidad de que este discurso de protección de los océanos se extienda no solo en las ciudades que tienen mar, sino también en el resto.
"El mar da vida y nos da de comer", ha dicho la actriz, que ha elogiado la "maravillosa" combinación de la pintura, la costura y el agua en el diseño de los trajes.
Cada vez son más las instituciones y particulares que han convertido la defensa de la vida del planeta en una filosofía de vida y trabajan para que la población sea consciente de la situación de riesgo a la que se enfrentan los océanos.
El desfile, que ha estado seguido de un taller prendas usadas en nuevas piezas, es solo un pequeño paso para impulsar la participación ciudadana en la lucha por una gestión sostenible de los océanos que permita seguir disfrutando de su singularidad y belleza.
Numerosos representantes de la política malagueña han acudido al evento, entre ellos el alcalde, Francisco de la Torre, y el presidente de la Autoridad Portuaria, Carlos Rubio.
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