“¡Carmen, que he bajado antes que tú! ¡Qué guapa!”, le decía ayer su vecina del bloque de al lado, en Princi Jerez, un cuarto de hora antes de que el presidente en funciones, Pedro Sánchez, saliera del coche oficial y recorriera el barrio en un paseo que duró exactamente 25 minutos. Ni más ni menos. Carmen lo tenía todo estudiado. Venía de rojo, de peluquería y con las ideas muy claras. “Vengo a ponerme a la vera de él; me tengo que hacer una foto con él, si me dejan”, explicaba, al tiempo que mostraba su pulsera del PSOE y su abanico. “Soy del PSOE de toda la vida y toda mi familia. Yo lo digo así, y me da coraje la gente que oculta a quien vota”, señalaba. A los pocos minutos lograba su objetivo, ella y otras tantas decenas de vecinos y simpatizantes a los que no les importó el calor, ni la hora de la ‘quedada’ -cinco y media de la tarde-. Otros, a los que Pedro Sánchez también saludó, siguieron la visita desde la ventana de casa.
La bienvenida fue al ritmo de palmas y al grito de, “ole”, “guapo” y de “¡Con Rivera, no”. Acompañaban la alcaldesa y candidata a la Alcaldía del PSOE, Mamen Sánchez, a la que quiso mostrar su apoyo, recién llegado de Córdoba, para trasladarse a un acto a Sevilla, la secretaria provincial del PSOE, Irene García, que hizo selfies del presidente con los jerezanos a diestro y siniestro, entre otros compañeros. Antes de empezar el recorrido entre aplausos, fotos y más fotos, y besos y apretones de manos, no podía faltar el brindis con vino de la tierra. Seguían los piropos: “Vales más en persona que en la tele”, le decían, mientras otra chica transportaba a los presentes al momento en el que Penélope Cruz le entregaba el Óscar a Pedro Almodóvar. “¡Ay! Mira qué cerquita ahora!, decía nerviosa, colocándose para su selfie con Pedro Sánchez, a quien avisó expresamente para que posara. “Pedroooooooo”, le gritó.
Como Carmen, también logró su objetivo. El paseo seguía y hacía escala ante una asesoría fiscal. “Venimos a hacer la declaración de la renta”, bromeaba el líder socialista, que recordaba la inminente cita con las urnas. “Mirad, que este domingo hay que votar. Hay que votar y gobernar. Las dos cosas”.
En medio del recorrido, el jefe del Gobierno en funciones se dejaba querer e intentaba escuchar a los que lograban hacerse un hueco y saludarlo personalmente: un profesor que se quería jubilar a los 59 años, un mecánico, Manuel, que le entregaba en mano un folleto de las reivindicaciones de AUPA (Autónomos Unidos para Para Actuar), con el que se detenía y compartía expresamente alguna de estas mejoras, y otros tantos más. Pero todo no iban a ser piropos. Otro señor no le ocultaba su antipatía: “El PSOE era bueno, pero él lo está estropeando to”. La respuesta era automática: “Aquí los malos son los fascistas, no los catalanes”, apuntaba otro ciudadano.
Eran ya casi las cinco. Tocaba irse y con la despedida volvían las palmas y un “viva Jerez”. Antes de poner rumbo a Sevilla, le deseaba suerte a Mamen Sánchez, que le agradecía el “esfuerzo” por venir a Jerez. “Ha sido un paseo eficaz, ha podido responder a preguntas de multitud de ciudadano; la gente se ha podido llevar respuestas del presidente; a veces es más interesante que conteste a las preguntas que incluso dé un acto en el que charle. Hemos quedado en hablar el domingo, y me ha dicho: “no sólo tienes que ganar, sino que hay que gobernar”.
Envía tu noticia a: participa@andaluciainformacion.es