Después de varias décadas en el Partido Popular, Wenceslao Font sorprendió a todos días antes de la presentación de las listas municipales con su fichaje por Vox. Pasó de estar en el equipo de trabajo de la candidata popular, Pilar Marín, a ser alcaldable por una formación política que ha irrumpido con fuerza en el Parlamento andaluz y en el Congreso de los Diputados. Font promete consenso y diálogo como banderas de su entrada en el Ayuntamiento de Huelva. Las tradiciones y la economía, claves de su programa.
¿Por qué hay que votar a Vox?
–Vox llega a Huelva con muchísima ilusión. Trae valentía y un proyecto fuerte, decidido, elegante y con un especial apoyo a las familias. Yo soy independiente y vengo a una estructura muy fuerte, como ya se ha visto en las anteriores elecciones.
¿Cómo se define como persona?
–Soy una persona muy independiente, social, valiente y decidido. Me considero una buena persona. Muchas veces me han preguntado que por qué saludo a alguien que siempre me pone mala cara. Creo en las buenas personas, en la unión y en buscar siempre lo mejor para todos. Huelva necesita recuperar el onubensismo porque parece que es una ciudad dormida. Vox me brinda ser cabeza de lista y estoy haciendo una campaña lúcida, transparente, ilusionante y con esperanza.
¿Su ideología y la de Vox son similares?
–Nadie tiene una ideología cien por cien del partido en el que milita. Antes tenía unas ideas que han ido evolucionando con el tiempo. La evolución de las ideas significa concebir lo bueno de donde estás y yo encuentro en Vox muchas cosas buenas. Por ejemplo, un primo mío vive en Cataluña y lo está pasando muy mal porque no puede trabajar si no habla catalán. Ahí está Vox para que todas las autonomías tengan igualdad de derechos.
¿Vox es ultraderecha?
–Yo no me considero de ultraderecha, me considero español. Por tanto, como español, andaluz y choquero que soy, pretendo lo mejor para Huelva, Andalucía y España.
¿Cómo fue su repentina salida del PP y fichaje por Vox?
–No fue tan rápido como parece. Llevaba unos meses en los que no me sentía totalmente incluido dentro del equipo del PP. Pilar Marín es una persona maravillosa y con cualidades pero a nivel personal sentía que no estaba dando todo lo que podía dar. Pensaba en retirarme de la política, cortarme la coleta como hacen los toreros. Pensé en irme a la empresa privada. Entonces, me llamó Rafael Segovia -presidente de Vox en Huelva- y creí que era el momento de entrar en un barco más valiente y más ilusionante. Ya hace cuatro años también pude ir a Vox pero todavía estaba haciendo un trabajo importante.
Usted quería ser alcalde...
–Desde pequeño no es que quisiera ser alcalde pero sí quería ayudar a las personas. La política me ha ayudado a perder la timidez. Siempre he querido construir si estaba ilusionado. Y no lo hago por dinero. He creado diferentes web sobre Huelva que no le saco económicamente nada, sólo la satisfacción de luchar por Huelva.
¿Con qué fuerza cree que podría entrar Vox en el Ayuntamiento de Huelva?
–Nos dimos una sorpresa en las últimas generales. Pasó de cien votos hace cuatro años a 10.373. Hay muchas personas que creen que Vox tiene su espacio a nivel municipal porque puede traer cosas buenas para Huelva. Conmigo al frente garantizo que habrá lealtad y humildad en el trabajo. Nuestro deseo es entrar por la puerta grande.
¿En qué centra su programa electoral?
–Quiero recuperar el onubensismo y ese orgullo por nuestra tierra. Quiero una ciudad alegre, que tenga paquetes turísticos para que las virtudes de la provincia estén presentes en la capital. Quiero una ciudad limpia siempre, no ahora que hay elecciones y hay multitud de vehículos de la limpieza. Quiero una Huelva segura y con mejores comunicaciones. El deporte es un caballo de batalla importante para defender al Decano, al IES La Orden, al Club Marítimo... Y estamos con las tradiciones, que hay que ayudarlas e impulsarlas. El otro día despedí a Juan Carlos Aragón, hay que ayudar al Carnaval, a la Semana Santa, a la Cinta, a San Sebastián, al Rocío y a las Colombinas.
¿Se considera feminista?
–Yo soy feliz como soy porque creo que todo el mundo puede decidir lo que quiera ser. Creo en la igualdad entre hombres y mujeres. La igualdad significa ser feliz sin molestar a nadie. Hay todo tipo de formas de pensar, vivir y sentir y a todos les digo “olé por ti si tú eres feliz”.
¿Haría pactos con Guillermo García de Longoria y Pilar Marín?
–Por supuesto, siempre que sea necesario para Huelva. Hay que llegar a acuerdos con personas y partidos. Los que me conocen saben que soy dialogante.
¿Le daría la llave de la gobernabilidad al socialista Gabriel Cruz?
–Todo es posible si dice mañana algo bueno para todos, pero creo que ha suspendido esta legislatura. Huelva está dormida económicamente y carece de un planificación de desarrollo de futuro. Ahora mismo no gobernaría con él.
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