El Gobierno andaluz de PP-A y Ciudadanos (Cs) se plantea "promover políticas de adopción afines a los perfiles de los menores que precisan ser adoptados", que en su mayoría presentan necesidades especiales, "trabajando con las familias que se ofrecen" para ello "con un cambio de expectativas en relación a la edad y otras necesidades esenciales de los menores que se encuentran en acogimiento residencial en Andalucía".
Así lo ha anunciado este lunes la consejera de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación, Rocío Ruiz, en una comparecencia en comisión parlamentaria y en respuesta a una pregunta que sobre políticas de adopción le ha formulado el presidente del grupo parlamentario Vox en Andalucía, Francisco Serrano.
En concreto, el representante de Vox ha subrayado que en España "no está asegurado" el necesario "relevo generacional" porque "tenemos una tasa de natalidad negativa", de forma que "es imprescindible fomentar inexcusablemente la natalidad para asegurar el pago de pensiones a personas de tercera edad", una población que "cada vez es mayor", por lo que "estamos abocados a un invierno demográfico".
Ante ello, Serrano considera que "es preciso fomentar una cultura de la vida y favoreciendo que muchas jóvenes que quedan embarazadas puedan llevar a buen término sus embarazos sin recurrir a la tragedia del aborto".
Sobre las adopciones, el diputado de Vox se ha mostrado partidario de "fomentar políticas de adopción", y ante el hecho de que la adopción internacional resulta "costosa y compleja", ha preguntado a Rocío Ruiz si el Consejo de Gobierno andaluz "se ha planteado promover políticas de adopción dentro del ámbito del territorio andaluz haciendo posible que muchos padres puedan adoptar dentro del espacio de Andalucía".
La consejera ha apostillado en su respuesta que "la adopción no tiene nada que ver con el fomento de la natalidad", sino que es "una medida de protección con carácter irreversible, definida y regulada" en el Código Civil, y que "se promueve cuando se han agotado las posibilidades de reintegración de un menor previamente declarado en desamparo en su familia biológica".
De esta manera, "para proceder a una adopción tiene que haber un menor declarado en desamparo tutelado por la Junta", según ha recordado la consejera, quien ha defendido que "todas las actuaciones" de la Administración autonómica "en materia de protección de menores están encaminadas a prevenir las situaciones de desamparo y, si eso no es posible, a reintegrar al menor en su familia".
Con esta finalidad, según ha continuado Ruiz, "se promueven tanto ayudas económicas a las familias en situación de precariedad social y pobreza, como el programa de tratamiento a familias con menores en situación de riesgo de protección".
Además, ha explicado que, "con carácter general, en Andalucía se proponen para adopción nacional una media de 150 menores cada año, siendo prácticamente el doble el número de familias que se ofrecen para adopción; en concreto, una media de 327 familias al año".
Ruiz ha precisado que "el 60% de estos menores" que se proponen para adopción "presenta algún tipo de necesidad especial", si bien "la mayoría de la familias que se ofrecen para adoptar" en Andalucía "quieren menores de cero a tres años que no presenten algún tipo de necesidad especial", lo que conlleva que "muchos niños susceptibles de adopción queden a la espera de familias adoptivas que acepten su perfil".
De ahí, según ha agregado, que el actual Gobierno andaluz "está centrado en dar carácter preferente a las solicitudes de acogimiento y adopción para menores con necesidades especiales y conseguir familias para este perfil de menores".
En este sentido, "consideramos necesario que las familias solicitantes abran sus expectativas a la adopción de menores con necesidades especiales, ya que el 60% responde a este perfil", según ha abundado la consejera.
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