Y es que las denuncias continúan produciéndose, a pesar de las campañas de concienciación social y educación que organizan las distintas administraciones, con el objetivo de evitar que vuelvan a producirse casos de agresiones en las parejas. “La media de atenciones en la Delegación de la Mujer no desciende, a pesar de gran esfuerzo que tanto Guardia Civil, como Policía Local llevan a cabo,” ha comentado Pedro Peña, jefe del grupo Minerva.
Por su parte, la responsable municipal de Mujer, Juan Capurro, ha animado a las víctimas de maltratado a denunciar. “Sabemos que denunciar a sus parejas en muy difícil, porque las mujeres tienen miedo a posibles represalias, pero deben dar ese paso para evitar nuevas agresiones”, ha comentado Capurro, quien sin embargo aclara que “el 99 por ciento de las mujeres que se atreven a denunciar no vuelven atrás”.
En cuanto al trabajo del grupo Minerva, éste no sólo se limita a asesorar y proteger a las víctimas de violencia machistas, sino que también se centra en la vigilancia de los maltratadores. “Así los agresores saben que estamos pendientes a cada caso”, apunta Pedro Peña.
Perfil
Por último, respecto al perfil de las víctimas, éstas no sólo se localizan entre familias de un nivel socio-económico bajo, sino que también aparecen en otros estratos sociales. “Por tener un nivel económico bajo no significa que sufra más casos de violencia machista, pero las que tienen mayor poder adquisitivo acuden a abogados privados”, aclara Capurro.
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