El Santuario-Camarín de Nuestro Padre Jesús Nazareno ha abierto este jueves sus puertas para celebrar el primer día del culto más esperado de la Cuaresma jienense, el besapié a El Abuelo. Numerosos jienenses hicieron cola para estar cerca de Él.
La Imagen más venerada en la capital, lucía su túnica morada en un altar con un exorno floral colorido, en el que no faltó el clavel rojo, que llenó de olor el templo. Una Cruz presidió el Altar, símbolo del cristianismo y del nazareno.
El año pasado era la Virgen, María Santísima de los Dolores, la que aguardaba a su Hijo. Junto a la Cruz, dos ángeles, la corona de la Virgen y un libro de actas.
El talón de la Imagen vuelve a estar protegido por una estructura de metacrilato que evita el desgaste de la policromía y daños estructurales en la talla. Y es que son miles las personas que pasan para besarlo, rezarle y estar cerca de la Imagen.
Mujeres del cuerpo de camareras se encargan de la organización de los fieles, prestando atención a personas con discapacidad, facilitando su acceso al templo, y a personas con niños pequeños. Desde las nueve de la mañana, el templo se llenó de fieles.
En Jaén se notaba que el besapié había comenzado, con calles aledañas muy transitadas. La espera ha sido de un año.
Este viernes y el próximo domingo, el horario es de 9 a 13 horas y de 17 a 20 horas. El sábado se mantiene idéntico por la mañana, pero se amplía hasta las 23 horas.
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