‘Siete cruces y un nazareno’ es el título del nuevo poemario del jienense Martín Paredes (1975), dedicado a la Semana de Pasión jienense, a sus Cristo crucificados y a Nuestro Padre Jesús Nazareno, la Imagen que protagoniza una de las madrugadas más antiguas de la Semana Santa andaluza, según el autor.
El escritor y cofrade rescata el origen y la esencia de lo que fue y tiene que seguir siendo la Semana Santa de la capital, con medio centenar de poemas dedicados al Cristo de las Misericordias, de la Clemencia, de la Humildad, de la Buena Muerte, de la Expiración y del Calvario, además de a El Abuelo. Sobre éste último, con el poema ‘Ropavieja’, el poeta recuerda el paso del Nazareno por la plaza de Los Rosales, donde hasta el año 1931 el convento de la coronada se utilizó como cárcel y los fabricanos paraban el paso para que los presos cantaran saetas a la Imagen.
“Los poemas rescatan la Semana Santa jienense antigua, aquella que se ha ido perdiendo desde el año 2000 por la influencia de la Semana Santa de Sevilla. En realidad, la identidad jienense sigue estando ahí y es histórica. La Semana Santa de Jaén es romántica, antigua, tradicional, añeja y propia”, explicó a VIVA Martín Paredes. También hace un guiño a los costaleros del Cristo de Las Misericordias, al mítico primer turno. “El Cristo salía a hombros y ahora, a costal. Es una de las líneas rojas que no se debería haber traspasado, pues no es nuestra forma de cargar”, dijo.
El libro ha sido editado por ‘Poesía eres tú’ y los beneficios de la venta del poemario se destinarán a las monjas de Santa Clara. Denota el carácter solidario del autor, que ya en 2018, tras la organización de una exposición con fotografías de Ernesto Espinosa y sus poemas, destinó la recaudación a la parroquia de San Juan. La fotografía de El Abuelo que recoge el poemario es de Espinosa.
El lugar escogido para la presentación ha sido la Academia de Arte Carrillo. Los jienenses Francisco Carrillo Cruz y los hermanos Francisco y Alberto Carrillo colaboran en el poemario con pinturas y grabados.
La portada, una imagen del Santísimo Cristo de las Misericordias, es obra de Carrillo Cruz, mientras que la contraportada, imagen de Nuestro Padre Jesús, es obra de Francisco Carrillo Rodríguez, autor de la mayor parte de los grabados.
La pintura que introduce al lector a los poemas que Martín Paredes dedica al Cristo de Los Estudiantes es obra de Alberto Carrillo.
La presentación ha corrido a cargo de Manuel Molina. El prólogo está firmado por el costalero Gregorio Cano y el epílogo, por Rafael Calatayud. En la solapa ha participado José Domingo Lanzas.
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